Kimetsu No Yaiba /One Shots/

Sanemi X Kanae

Aviso esto aquí arriba, esta historia tendrá contenido +18, si este contenido no te gusta puedes pasar este one shot, si lo lees ya es bajo tu responsabilidad.
-----------------------------------------------------------

Salió el sol, el peliblanco tapó sus ojos con su antebrazo y se movió con pereza hasta sentarse, se escuchaba todo el tiempo su teléfono sonar, sonaba y sonaba y esto le irritaba. Se levantó algo molesto y agarro con algo de furia el móvil, miro los mensajes que no paraban de saltar, una pequeña sonrisa se formó en su rostro y toda esa furia se esfumó en tan solo segundos.

-No lo recordaba- miro hacia la ventana, miro la hora en su teléfono y soltó un suspiro -tengo tiempo pero debo darme prisa igualmente

Agarro unos vaqueros de su armario y una sudadera color blanco, se calzo con unas zapatillas negras y de suela blanca, agarro el móvil, la cartera y las llaves y salió de la casa.

Caminaba mirando todos los escaparates, se detenía a detallar cada pequeña cosa que veía, quería buscar el regalo perfecto. Buscaba y buscaba con un gran ánimo, estaba seguro que encontraría algo precioso.

Marco el teléfono de un buen amigo suyo, Tomioka Giyu.

-Tomioka- dijo al escuchar que el otro agarro la llamada

Un silencio se hizo presente.

-Eres un mal educado, que te cuesta saludar- rodo los ojos y siguió hablando -se que se te dan muy mal las chicas, solo hay que verte

Se escuchó rechistar al contrario.

-Oye, sabes que es la completa verdad- miraba un escaparate mientras escuchaba al contrario -que siii, lo se- rodo los ojos

Ahora mismo se encontraba en un escaparate en el que había joyas, las miraba mientras escuchaba a Giyu.

-¿Como le va a gustar eso?- se notó algo molesto al decirlo -Tomioka, no

Seguía mirando las joyas y los precios.

-Esta bien, pensaré tus ideas- entrecerro los ojos al ver una pulsera que llamó su atención -te cuelgo, no la cagues con Shinobu -colgó

Examino la pulsera, realmente le llamó la atención, dirigió su mirada al precio y aunque fuera algo alto realmente valía la pena. Entró a la tienda y pidió aquella pulsera, miro si la muñeca de ella cabía allí y vio que podía desabrocharse así que la compro sin dudar. Camino de vuelta a su departamento, con la cajita de la pulsera guardado en su bolsillo con la mano dentro para que la cajita no salga del bolsillo. Saco las llaves de su otro bolsillo y las metió en la cerradura, entró y cerró la puerta poco después saco su teléfono y miro la hora.

-Todavía me queda el tiempo suficiente para preparar el departamento- se dirigió a la cocina y saco una lasaña para descongelar y poco después meterla al horno

Se dirigió a un armario y saco unas velas y unas copas acompañadas con una botella de vino, colocó todo en la mesa, saco dos platos y unos cubiertos para ponerlos en la mesa. Se acercó a la cocina y miro el horno para ver cómo iba la lasaña.

Ya estaba casi todo preparado solo faltaba que su acompañante llegase y pudieran disfrutar ese precioso san valentín juntos.

Al rato sonó la puerta, el peliblanco no tardó mucho en dirigirse a esta y abrirla, nada más abrirla el rostro sonriente de la pelinegra no tardó en llegar a sus ojos.

-Buenas Sanemi-kun- dijo esta mientras se ponía de puntillas para dar un beso en la mejilla al contrario, este se echo a un lado y la dejo pasar

-Le quedan unos cinco minutos a la comida, pero puedes ir sentándote