▸𝐌𝐘 𝐇𝐄𝐀𝐕𝐄𝐍, 𝐃.𝐎'𝐁

𝟎𝟎

-𝐌𝐘 𝐇𝐄𝐀𝐕𝐄𝐍: 𝐏𝐑𝐎𝐋𝐎𝐆𝐎.

Caminé a la cocina mientras arreglaba mi cabello, llevaba un short y una hoodie extremadamente grande la cual, claramente, era mi pijama.

Esta semana por fin descansaría de todos los proyectos que tengo en proceso, hace mucho que no actuaba y me estaba costando mucho aprenderme todas mis líneas pero gracias a mi padre ha sido mucho más fácil memorizarlas.

La última vez que actué fue en la mejor serie que he visto, Teen Wolf, como Cora la hermana de Derek y que gracias al cielo, aún me llevo con la mayoría de ellos.

Saqué el jugo de la nevera y lo dejé en el mesón para después agarrar un vaso de la estantería.

-¿Qué harás mañana?- escuché la voz de mi padre provocando que diera un brinco.

Tiré mi cabeza hacia atrás presionando mis labios, sabía a que se refería.

-Iré contigo ¿si?- respondí girándome a verlo.- pero por favor deja de insistir.

-Bien, dejaré de insistir, ya estoy feliz solo con saber que me acompañarás al partido- sonrió victorioso y solté una risa.

Papá y yo éramos los únicos viviendo en casa, mamá había fallecido hace unos años atrás cuando era pequeña debido a la leucemia, papá  y yo supimos salir adelante en nombre de ella.

-¿Apostamos?- pregunté sentándome en el sillón a su lado.

-No le iré a los Mets porque tal vez y los Dodgers ganen, pero sé que si no dejo que apuestes por los Dodgers, no me acompañarás- soltó provocando que yo riera levemente.

-Que te digo, hiciste de tu hija un arma mortal en las apuestas.

Los dos sonreímos y chocamos los cinco para después seguir observando la televisión, hasta que mi teléfono sonó pero decidí ignorarlo porque la película se ponía cada vez más intrigante, no duraría mucho ya que debía ir a dejar mi vaso en la cocina y buscar mi gorra de los Dodgers para el partido de mañana.

¿Estaba emocionada? Completamente. 

No porque tenía una apuesta con papá sino porque no había ido a un partido de los Dodgers hace mucho tiempo y me encantaba ver como juegan en vivo y en directo.

「...」

-Ten cuidado- advirtió papá mientras corría a sostener el vaso.

-Gracias, volví a marearme- dije soltando una mueca.

-Después de el partido te llevaré con el medico, no es la primera vez que te pasa eso.

-Estoy bien, solo fue un mareo - sonreí de lado y el negó.

-Iremos, mi última palabra.

Suspiré cansada y volví a caminar hacia mi habitación, no quería que papá se preocupara pero sé muy bien la razón así que lo entiendo.

Me recosté y revisé twitter una vez más.

-¿Desde cuán sigo a Dylan?- me pregunté a mi misma viendo una de sus publicaciones.

 No le di importancia y apagué el teléfono, mañana sería un muy gran día o eso creo.

-campankow.