𝟎𝟔

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-𝐌𝐘 𝐇𝐄𝐀𝐕𝐄𝐍.


Caminé hacia la entrada, sorprendentemente Dylan había escogido una casa en la misma privada que papá y yo, me alegraba por su puesto estaríamos más cerca y nos facilitaría mucho llegar juntos al set la semana que viene.

Observé toda la casa, era muy linda y lo único que me faltaba era observar el patio.

-Dylan, ¿mi opinión te servirá?- pregunté cerrando la puerta del armario.

-Claro que sí Junie- sonrió y asentí.

-Esta casa es perfecta para ti- sonreí acercándome a el.

Me encantaba la arquitectura, si no hubiera logrado nada de lo que logré me hubiera hecho arquitecta.

-¿Crees?- preguntó observando los ventanales y asentí dando un pequeño salto.

-No te miento, me gusta que combina todo contigo- tomé aire- ¿puedo ayudarte a decorarla?.

-Claro pero ¿segura que no quieres ir con Shelley al centro comercial?- preguntó y suspiré.

Había olvidado decirle que Shelley se fue de emergencia.

-Shelley se fue -dije haciendo una mueca- con Britt.

Su cara no cambió para nada, simplemente sonrió, Britt era su ex y es la también mejor amiga de Shelley.

-Está bien, iremos nosotros me agradaría tu ayuda en esto de escoger decoraciones- sonrió y yo reí caminando a su lado.

-Entonces- sonrió Tabitah, la vendedora de bienes y raíces- ¿La compran? creo que sería un buen hogar para ustedes dos.

Reí ante su comentario.

-Somos mejores amigos pero sí, le gustó- sonreí amablemente.

-Me gustaría comprarla, ¿Dónde puedo firmar?- preguntó Dylan y Tabitah sonrió.

-Pasen por acá así firmas todos los papeles- sonrió Amable y Dylan asintió.

-Iré a ver el patio ¿si?.

-Claro, te alcanzo en 5- contestó Dylan y asentí.

Caminé hasta la puerta corrediza que daba al patio, sonreí al ver el sol ponerse, di unos pequeños pasos para poder salir hasta este y observé lo grande que era.

Debió costar una fortuna.

La piscina era muy bonita, grande y se veía claramente profunda.

El gran cerco combinaba perfectamente con el color de la casa y eso lo hacía verse cada vez más formal, me gustaba.

Y fue hasta entonces que recordé lo que había pasado ayer, después de mi desmayo papá adelantó la cita con el doctor y era mañana por la mañana.

¿Dylan lo sabía? No, no se lo quería decir porque se preocuparía y no quería eso.

-Ahora es toda mía- sonrió y giré a verlo.

-Buen gusto en casas O'brien- sonreí dejando mi teléfono sobre una pequeña mesa del patio.

-En realidad, tú me diste los detalles de este y entonces me pareció buena.

Sonreí y caminé por alrededor de la piscina.

-Si quieres podemos hacer la cena aquí ¿Qué te parece?- pregunté viéndolo.

-Me parece genial, podemos también presentar mi casa con todos- sonrió y asentí.

-Bien O'brien- guiñé un ojo- ¿Podrías llevarme a una librería? después de eso podríamos ir al centro comercial.

-Vamos.

Sonreí dando un pequeño salto, había dejado mi lectura hace mucho pero ahora mismo era lo único que me ayudaba si iba a empezar a memorizar diálogos para las películas que vienen.

「...」

-¿Te gusta este?- pregunté mostrándole el libro a Dylan.

-Se ve bueno ¿Stephen King?- preguntó y negué- Son buenos, para mi sí.

-Los leí todos- reímos y acomodó su gorra- Tal vez lleve este.

-¿After?- leyó dudoso el título- Bueno, deberás llevar todos los demás.

-¿Demás?- pregunté confundida.

-Sí, según el numerito de aquí hay más, te ayudo.

Sonreí y sostuve tres libros mientras que Dylan cargaba los otros dos, caminamos al mostrador donde encontramos a un chico alto, con la nariz puntiaguda casi igual que Dylan pero la de este chico mucho más respingada.

¿Qué hacían para nacer con ese tipo de nariz? Digo, la mía no es tan mala, es bonita, pero la de ellos de otro planeta.

-¿Puedo ayudarlos en algo?- preguntó amablemente y sonreí.

-Los cinco- contesté dejando los libros en el mostrador y agarrando los que llevaba Dylan.

-Buena elección, solo que espero que seas acostumbrada a lo empalagoso- comentó riendo y reí confundida.

-Gracias, supongo.

Noté la mirada del chico, algo muy profunda, incómodamente tomé mi cabello y lo puse adelante cubriendo mis pechos que gracias a la blusa de tiras se dejaban, casi, notar.

Parece que Dylan lo notó, lo siguiente que hizo me sorprendió mucho, su brazo cruzó mis hombros y besó mi cabeza para después completar un abrazo, haciendo que el chico gire los ojos y termine de poner mis libros en una bolsa.

-Buen día- sonrió mirando a Dylan.

Asentimos y caminamos a la entrada saliendo del lugar haciendo que las campanitas suenen, reí ante la reacción de Dylan.

-Gracias- sonreí abriendo la puerta del auto.

-No hay de qué Junie, la incomodidad se notaba.

Cerramos la puerta del auto y dejé la bolsa con los libros en la parte de atrás ahora emprendí camino hacia casa.

-Tengo que contarte algo- solté por fin tomando el valor de comentarle lo de la noche anterior.

-Dime ¿algo grave?- preguntó viéndome.

 -Bueno, ayer tuve un desmayo mucho más grave y quería pedirte que me acompañaras al medico mañana- solté sonriendo de lado.

-June, ¿por qué no me avisaste?- preguntó y suspiré.

-No quería que te preocupes Dylan, Shelley tampoco lo sabe.

-De todas formas, deberías avisarnos June ¿a qué hora debemos ir?- preguntó y sonreí.

-Pasaré por ti, Gracias Dylan.

El sonrió y miré a la carretera, esta vez Dylan era quien manejaba y eso me alegraba ya que debido al desmayo de ayer, dudo mucho poder ver con claridad la carretera.

Mañana sería un día largo.


-campankow.



▸𝐌𝐘 𝐇𝐄𝐀𝐕𝐄𝐍, 𝐃.𝐎'𝐁Donde viven las historias. Descúbrelo ahora