Cuatro

1.3K 35 8
                                    

Advertencia: Apto para todo publico.

Rota.

______ Salvatore.


La madera cruje dentro del abrazador fuego, meneo el vaso de whisky en mi mano derecha provocando que los hielos golpeen contra el vidrio, solo el abrumador silencio es mi acompañante en aquella habitacion, mi mirada se pierde en las pequeñas chispas que brotan con cada crujir de la leña.

Ha llegado

El sonido de pasos aproximándose a la entrada me hacen dejar el trago en la mesita de centro abruptamente para correr hasta la puerta principal.

Abro apresurada mas no encuentro a nadie, doy un paso fuera de la casa inspeccionando ambos lados pero el lugar está completamente vacío, otra ilusión, cabizbaja me dispongo a entrar cuando una corriente de aire helada golpea contra mi espalda, el escalofrío que me provoca eriza toda mi piel,  hecho un último vistazo negándome a aceptar lo evidente pero obtengo el mismo resultado.

Nadie

Una ligera sonrisa se plasma en mi rostro, me he de ver patética, cierro la puerta sin más riendome en mis adentros ante mi estupida, camino a pasos lentos y paso a un lado de la mesa que había preparado para ambos—En verdad creí que llegarías esta noche—murmuro.

Al igual que ayer y la noche antes de ayer.

Al igual que creí que llegarías para la cena de navidad.

Enciendo la luz al principio de las escaleras dispuesta descender a la reserva de vinos, me paseo por cada los estante, así como hay gente que colecciona arena yo lo hago con los vinos, poseo desde el más caro y exclusivo, hasta uno de un autoservicio, pero cada vino en esta reserva tiene una historia.

Antes de darme cuenta llego a pequeño mueble de cedro al final de la habitación, el lugar donde se guardan bajo llave los más preciados, abro con cuidado y deslizo mi dedo de izquierda a derecha sobre el borde de madera que les sostiene.

Me detengo en cuanto leo en la etiqueta "Domaine de la Romanee-Conti Grand Cru", uno de los más prestigiosos y el vino de nuestra fiesta de compromiso.

Sus ojos celestes chispean al encontrarse con los míos, acaricia mi rostro con su pulgar como si buscase memorizarme, el corazon no deja de latirme rápidamente, no importa cuantas veces lo tenga asi de cerca siempre lograra acelerarme. Sus ojos miran mis labios fijamente, humedece sus labios y devuelve la mirada a mis ojos, sonrie y se acerca a mi para depositar un tierno y casto beso en mis labios —Siempre te voy a elegir—dice en un murmullo apenas audible para ambos.

Sonrío con cierta nostalgia, mi reloj en la muñeca marca que faltan diez minutos para que termine el año, diez minutos para termine mi plazo. Disipó todos mis pensamientos al llegar  hasta la pieza principal de mi colección  "Henri Jayer Richebourg Grand Cru", el elixir que todo amante de vino debe probar alguna vez en su vida, quizás era el vino más costoso pero eso no era lo importante, sino que era el vino que repartiríamos en nuestra boda.

Me dirijo con dicha botella hasta el comedor, tomo una copa de la perfecta mesa que nadie ocuparía esa noche, quito el corcho de la botella para servirme algo de vino.

Al saborearlo el sentir de decpcion y tristeza me embarga, me dirijo hasta el frente de la chimenea, el inmenso reloj encima de esta me recuerda que faltan tres minutos para que termine el año.

Kai Parker || One Shots || +18Donde viven las historias. Descúbrelo ahora