Fijo

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No soy del porcentaje de los que sobreviven día con día, invierno tras invierno.
Necesito santuarios en las páginas de libros, en pequeñas melodías sin voz, nada me reconforta ya, ni la bebida ni las pastillas, soy más despojo que persona, más ansiedad que ganas.

El dolor no es poesía Donde viven las historias. Descúbrelo ahora