Quiero irme a casa, estoy cansada de vagar por las calles de la ciudad, desbordando mis anhelos en vagabundos y suplantando mis propios sueños, mis labios te extrañan, mis manos están frías y ya me he aprendido el nombre de todas las cafeterías por aquí, el café ya no ayuda, quizás tu le ponías más azúcar, y el de tus ojos lo extraño.
Quisiera dormir, dormir una eternidad y quisiera soñar contigo, soñar todas las noches, soñar que me coges de la mano, que quiero que estes en mis sueños, que así dueles menos, al menos eso creó .

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El dolor no es poesía
Poesía"Quizás un corazón herido entiende cómo no causar dolor en los otros o como destrozarlos también."