Elliot (actualizando)

Capitulo 5

GRACE

—¡A moverse señoritas!—alza la voz la profesora—¡rápido, rápido, rápido!

Todas trotamos lo más rápido que podemos en la cancha de atletismo. El sol nos pega directamente, siento algunas gotas de sudor correr por mi frente pero me las quito con la palma de la mano e intento controlar mi respiración.

Margo me alcanza y hace una mueca de cansancio.

—La odio—comenta— le encanta vernos sufrir.

—Lo sé.

Dos compañeras con las que casi nunca hablamos se nos acercan y nos miran sin parar de trotar. Ambas tienen una sonrisa en sus caras.

—¿Ustedes son amigas del nuevo?—una de ellas pregunta.

Margo y yo intercambiamos mirada y negamos con la cabeza.

—¿Por?—pregunta mi amiga.

—Vimos como las defendió el otro día en el campus.

—Cualquiera lo hubiese hecho—digo.

—No Grace, —habla esta vez la otra chica— no cualquiera como ese hombre.

Me las quedo viendo sin decir nada hasta que suena el silbato y nos detenemos. Margo lleva sus manos a sus rodillas mientras intenta controlar su respiración. Yo suelto una bocanada de aire.

—¡Muy bien!—oímos la voz de la profesora otra vez— a continuación harán quince abdominales y quince sentadillas.

—Perra—murmura la morena y yo sonrío.

Yo no me considero una deportista pero si se que puedo soportar más estas cosas que la chica que tengo a mi lado. Ella jamás hace ejercicio.. en fin, no tiene ni un poco de grasa en su cuerpo.

—¡Ahora!—vuelve a sonar el silbato haciendo que me tape un oído con la mano.

Me siento en el piso para empezar a hacer los abdominales. Subo y bajo con concentración hasta que esta se va por completo al ver a lo lejos a Elliot. El francés se encuentra parado viéndonos mientras fuma con tranquilidad.

—¿A quien miras?—pregunta Margo siguiendo mi mirada hasta que su expresión cambia al verlo a unos metros— oh, con que al franchuto ¿eh?

Ruedo los ojos y continúo haciendo el ejercicio.

—Seguramente irá a la fiesta de esta noche—opina con una mirada pícara — no creo que no vaya.

Claro, la fiesta. No me acordaba que Jack, —uno de los chicos del equipo de natación— hará una fiesta en su casa esta noche e invitó a todos. Dudo que Elliot vaya, algo me dice que no es su ambiente. Y viéndolo como es, se que le gusta la soledad.

—Lo dudo—respondo levantándome del suelo para buscar mi botella de agua. Ella me sigue.

—¿Por qué lo dices?—me pregunta.

—Nada más míralo—ambas volvemos a verlo, ahora esta sentado mientras enciende un nuevo cigarrillo. Al frente suyo pasan dos chicas y le sonríen, el rueda los ojos y suelta el humo de su boca.—prefiere estar solo.

Margo bufa.

—Yo pienso que no es algo que el prefiere sino que más bien aceptó.

Frunzo el ceño para beber de mi agua.

—Todas las personas queremos tener a alguien a nuestro lado—se encoge de hombros— aún así demostremos lo contrario.

Levanto una ceja.