¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Nayeon se removió en la cama de Mina, alertando a la alfa que se encontraba a su lado, observándola dormir y también robándole un par de besitos, aprovechándose un poco.
— ¿Dónde estoy...? — Fue lo primero que pregunto Nayeon al abrir sus ojos y no reconocer para nada esa habitación — ¡MINA! — Cuando la pálida miro a un lado suyo a la alfa medio desnuda quiso morir, no lo podía creer, Mina se había aprovechado de ella — Q-que me hiciste... ¡Loba estúpida! — Trato de golpear a Mina, pero se encontraba tan agotada que no tenía ni fuerzas suficientes para pelear.
— Mi mishi es toda una pervertida, obviamente no te he profanado, Aún... — Mina jalo el cuerpo de Nayeon para que esta quedará en su pecho, la omega dio un gruñido como siempre ante el toque coqueto de la alfa — Como estabas tan enferma decidí traerte a mi departamento para cuidar de ti hasta que te cures, aquí es cuando me agradeces con sexo gatito — Un escalofrío recorrió el cuerpo de la omega ante la insinuación de la alfa.
— Vete a la mierda, maldita loba apestosa.
— No, no, nada de groserías gatita mala — Mina junto sus labios con los de Nayeon, moviendo sus labios en un ansiado beso que la pálida no sabía cómo seguir, pues Myoui Mina era la única Alfa que ha besado en su vida, pero cuando esta la besaba solo era un piquito. — Nayeon... creo que al estar así contigo hace que mi celo se adelante — Con cuidado metió sus manos debajo de la gran holgada camisa de la omega, delineando su espalda con sus dedos.
— Cierra la boca... — Nayeon intento bajar de arriba de la alfa, pero Mina se lo impedía, manteniéndola ahí — Mira Myoui, tengo que volver a casa, mi madre se preocupara mucho si no estoy ahí ahora mismo.
— Es demasiado tarde, crees que dejaré que te vayas... Qué clase de alfa sería si dejo ir a mi gatita sola — Una sonrisa burlesca abarcó su rostro, estaba jodidamente loca por culpa de la pálida que se encontraba encima de ella y lo único que necesitaba era que la omega se dejará mimar tan siquiera un poquito por ella y no sentir tan feo su rechazó.
— Myoui Mina, ¡Ya basta! — Dijo golpeando con un poco de fuerzas el pecho de la alfa, en serio, Mina tenía que aprender a respetarla — No estoy para tus comentarios calientes y mucho menos para tus cariñitos tontos, me siento muy mal en estos momentos y necesito volver a casa o me matarán.
— Llame a tu madre y le dije que te quedarías en mi departamento, también le dije que estabas enferma y que yo te cuidaría hasta que te sanará y ella estuvo de acuerdo. — A veces odiaba a su madre por siempre apoyar a Mina en todo.
— No necesito tus cuidados... — Eso de algún modo hizo que Mina se molestará y diera un fuerte gruñido a la omega.
— Déjame estar contigo... Omega eres mía, puedes comprenderlo, me necesites o no, yo quiero estar ahí... Apoyándote o cuidándote, no importa, me deprime demasiado tu rechazó — Con cuidado Mina peinó los cabellos rebeldes de Nayeon que caían por sus ojitos que le impedían verlos — Te necesito demasiado, más de lo que crees...
— ¡Aahh! Está bien... Me quedaré, pero si te llegas a aprovechar, cuando esté al 100% saludable, te partiré tu cara.
— Entonces no me chuparás mi pene como compensación — Nayeon gruño y Mina se soltó riendo — Tomaré eso como un sí lo haré...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
