Capitulo 11

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Mientras cada página era devorada por el cerebro de Cheryl, Toni observaba cada reacción de la pelirroja, que estaba acostada en su cama mientras Toni estaba apoyada en la barandilla exterior, observando el movimiento de los pasillos y admirando subrepticiamente a Cheryl.

Una risa graciosa llamó la atención de Toni, quien incluso trató de ignorarla, pero no pudo.

-¿Qué estás leyendo? - Preguntó Toni y Cheryl bajó el libro y miró a Toni, viendo sus brazos cruzados afuera.

- Una comedia romántica. - Cheryl dijo y Toni asintió. La pelirroja se dio cuenta de que Toni iba a decir algo, pero cerró la boca sin decir una palabra. - ¿Has leído este? - Preguntó, sosteniendo el libro en alto para que Toni pudiera ver la portada naranja y amarilla, que contenía a dos mujeres.

- Los he leído todos. Llegaron más libros esta semana de los que pedí. - Dijo Toni y Cheryl asintió.

- También puedo pedir algunos. Solo tengo que esperar a que mi hermana venga a visitarme. - Cheryl dijo y Toni dio un paso hacia la celda.

- Ella no ha venido a verte todavía o me equivoco? -

- Vino el día que yo llegué, pero ha estado ocupada con algunas cosas importantes. - Cheryl dijo, poniendo el marcador en el libro antes de cerrarlo.

- ¿Cuánto tiempo te dieron? Le dijiste a la doctora que no te pueden reducir la sentencia. - dijo Toni, entrando de inmediato a la celda antes de apoyarse contra la pared, deteniéndose frente a Cheryl.

- Veintidos años. - Cheryl dijo, viendo los ojos de Toni abrirse. -- ¿Y a ti? -

- No es ... -

- Para con eso. - interrumpió Cheryl, viendo los ojos marrones mirando al suelo. - Está claro que quieres hablar conmigo y acercarte. No sé por qué tienes que intentar mantener tu pose dura, pero conmigo realmente no está funcionando. - Toni resopló.

- No es una pose. - Dijo Toni y Cheryl se rió entre dientes.

- Está bien, pero incluso si eres así, no funciona conmigo. Se vuelve vergonzoso que intentes evitarme, pero siempre me dices algo. -

- No sé por qué sigo escuchando lo que dices. - Toni se quejó y Cheryl se rió, levantándose rápidamente de la cama para rodear a Toni con ambos brazos, evitando que volviera a salir.

- No necesitamos ser amigas, si eso es lo que temes, pero tampoco necesitamos ser dos extrañas, Toni. - Cheryl dijo y Toni miró los delgados brazos que la rodeaban.

- Realmente no me tienes miedo, ¿verdad? - Preguntó Toni con el músculo de la mandíbula apretado y Cheryl sonrió.

- A veces, pero cuidarme y preocuparte por mí de la forma en que lo haces, hace que sea difícil tener en cuenta que tengo que tener miedo de ti - Toni suspiró y la miró.

- Sentí pena por una pobrecita que sería presa de Heather. - Dijo Toni y Cheryl sonrió. ¿Cuál era el problema con ella que, dijera lo que dijera Toni, siempre sonreía?

- Te preocupaste por mi alimentación antes, Topaz. Realmente necesitas mejorar tus argumentos. - Cheryl dijo y Toni la apartó.

- No necesito mejorar. - Toni dijo exasperada y Cheryl se encogió de hombros.

- Como desées. - Cheryl dijo, recostándose en su cama y volviendo a su lectura. Los ojos marrones de toni miraron la decepción en el rostro de la pelirroja y luego resopló.

- ¿Necesitamos ser amigas si hablamos? - Preguntó Toni y Cheryl la miró.

- No quiero hablar más contigo. - Cheryl dijo, mirando hacia atrás en el libro.

- ¿Por qué? Querías hasta hace treinta segundos. - Toni dijo confundida.

- Tienes que aprender que no todo es como lo quieres. - Cheryl espetó y Toni resopló.

- No sé por qué pierdo mi tiempo contigo. - Dijo Toni resoplando, saliendo de la celda de nuevo y cruzando los brazos de nuevo.

Cheryl se escondió detrás del libro solo para sonreír. Descifrar a Toni fue demasiado fácil y, en pocos días, no entendió cómo todas las internas le temían a esta chica.

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Vio cómo la morena resoplaba cada cinco segundos y sabía que su ego estaba herido, así que hizo algo por la otra para restaurar la paz interior.

- ¿Toni? - Cheryl llamó y la chica que asomó la cabeza dentro de la celda. - ¿Estas aburrida? -

- ¿Por qué otra razón me habrías sacado a colación un tema? - Dijo Toni y Cheryl sonrió. La respuesta contundente ya estaba imaginada.

- ¿Quieres leer conmigo? - Preguntó Cheryl y Toni parpadeó lentamente, con escepticismo. - Te lo dije, no seremos amigas. - dijo, inclinándose más hacia la esquina y Toni asintió, acostándose a su lado.

- ¿En que parte estas? - Preguntó Toni.

- En la parte donde la chica es descubierta por los amigos de la protagonista. - Cheryl dijo y Toni se rió.

- Amo este libro. - Ella dijo y Cheryl se permitió contemplar su belleza de cerca. No fue una mirada de reojo, fue una mirada que te deja claro que estás siendo observado.

- ¿Ni siquiera me vas a decir cuánto tiempo te dieron? - preguntó la pelirroja y Toni la miró.

- ¿Siempre tan insistente? - Cheryl sonrió y asintió.

-- Siempre. - Ella respondió sonriendo y Toni resopló.

- Siete años, pero ya cumplí tres y por buena conducta ya he rebajado dos más. - Cheryl sonrió aún más y se giró de lado, enfrentando a la morena.

- Buen comportamiento, ¿eh? - Cheryl preguntó burlonamente mientras la sonrisa adornaba sus labios. - No me sorprende. -

- ¿No lo estas? - Toni preguntó sorprendida y Cheryl negó con la cabeza.

- No. No sé por qué las chicas te temen, pero ya pensé que eres buena.-

- Nadie se atrevió a cruzarse en mi camino aquí para que demuestre lo contrario. - Toni dijo con frialdad y Cheryl sonrió con la lengua entre los dientes.

- Me atrevi. - dijo Cheryl riendo suavemente. - Te desafío todo el tiempo, ¿no ves? Y sin embargo, no hiciste nada. -

- Quizás no quiero hacer nada. - Dijo Toni y Cheryl le miró los labios. Debe ser delicioso besar esa boca.

-  Eso es lo que quería conseguir. - Cheryl dijo, mirándola. - ¿Por qué eres diferente conmigo? - Toni se obligó a mirarla a los ojos, pero la forma en que los ojos de Cheryl estaban fijos en sus labios no la ayudaba mucho a concentrarse. La más bajita suspiró con rendición y comenzó:

- Me ayudaste ... - El sonido de una porra golpeando los barrotes llamó su atención.

- Blossom, dijiste que ibas a la enfermería y es casi la hora de que cierren las celdas. Entonces ve. - hablo una mujer policía rubia y Cheryl asintió.

- ¿Me lo dices mas tarde? - Cheryl susurró y Toni negó con la cabeza, poniéndose de pie.

- No tengo nada que contar. -

- ¡Toni! - Cheryl dijo y Toni se cruzó de brazos.

- Te están esperando. - Ella dijo y Cheryl resopló pero dejó el libro en la cama y se fue.

¡Toni se lo iba a decir, maldita sea! Pero a pesar de que Toni cambió de opinión acerca de decirlo, Cheryl no se rendiría fácilmente.

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<3

• Arrestada • CHONIDonde viven las historias. Descúbrelo ahora