La verdad

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—Sasuke, mantén la calma, estamos juntos pase lo que pase— dijo el azabache mayor entrando a su departamento. Se dirigieron hacia la sala viendo al rubio mayor.

—¿Deidara...?— dijo el azabache menor un tanto shokeado hace mucho que no lo veía.

—En vivo y en persona— contesto esté, bastante tranquilo y relajado.

Sasuke después de eso vio fijamente y retrocediendo un paso al ver a Naruto entrar a la sala.

—Sasuke tenemos que hablar— dijo tranquilamente, simplemente no podía con la presión de no hablar de eso ya.

—Todos tenemos que hablar— afirmó Itachi —querias saber el porque nuestro padre reacciono así, pues ahora lo sabrás, las cosas son muy diferentes—

—Sientate por favor— fue Deidara el que hizo la petición, sabía esa sensación al enterarse de todo pues el ya había pasado por ello —Se que todo esto es horrible, pero intentamos que para ti no fuera igual de duro que para nosotros, pero las cosas— soltó una pequeña risa, así era él, siempre trataba de aligerar la situación.

—Itachi...— susurro Sasuke, en ese momento sentía que solo podía confiar en él.

—Si no quieres hablar ahora está bien, pero en algún momento lo tenemos que hacer— afirmó, sabía que todo está era difícil, pero así era la situación, tenían que ser fuertes.

—¿Qué es lo que ocurre?— era lo suficiente inteligente para saber que algo pasaba, temía por la verdad, pero era mejor que nada.

—Es una vieja tradición de varias familias, incluyendo las nuestras— comenzó a explicar Deidara, para ese momento estaban sentados en los sofás, el rubio menor a lado de su hermano y el azabache mayor enfrente de estos, mientras Sasuke estaba de pie a lado de los tres.

—Es algo ridículo pero es peligroso negarse— continuo Itachi —El trato es simple, ellos piensan que para tener poder no se debe de sentir piedad y para ello se debe de morir cada sentimiento de ti, pero para lograrlo debes de mostrar a tu familia que realmente no sientes nada o sientes placer al ver o hacer a alguien sufrir, para esto se inició todo, al juntarse dos familias se preparan dos embarazos, el bebé que nasca primero será el líder del otro, su amo y señor, para que esté logré dejar atrás todo rastro de humanidad— explico. Sasuke por su lado solo estaba mirando al suelo tratando de captar toda la información.

—Yo nací el 10 de octubre y tu el 17 de octubre del 2000— dijo Naruto.

—¿Qué pasa si nos negamos a hacerlo?— pregunto el menor de todos, ignorando el comentario de Naruto.

—Obito y Karin lo intentaron— dijo Itachi — Su muerte no fue por un accidente— concluyó.

—Estan dispuestos a matarnos si no hacemos caso a la tradición— dijo Deidara.

—Los únicos Uchihas que fuimos mayores fue Óbito y yo, prometimos que haríamos lo que fuera con tal de huir de todo esto, sin embargo él fallo— dijo con una melancolía en su voz.

—¿Desde cuándo sabes esto?— pregunto el menor de todos hacia Naruto.

—Desde los 18...— hubo un pequeño silencio después de la respuesta, una lágrima salió del parte del menor, dándose cuenta hasta años después el porque el rubio se alejo de él cuando cumplió 18.

—Mamá...— susurro el menor, en ese momento entendió que su madre no era muy enfermiza y por eso se quedaba en cama por varios días.

—Tanto cómo Mikoto y mi madre sufrieron esto, ambas ya saben que tratamos de escapar y están de acuerdo con ello— hablo Deidara

—¿Pero que pasará con ellas?— pregunto Sasuke —No podemos dejarlas— dijo por último, estaba tratando de asimilar todo, pero ante todo guardaba la calma, después de ver la reacción de sus padres y recordar toda su vida muchas cosas empezaban a cobrar sentido para él y dolió sentía un gran nudo en la garganta, pero necesitaba tranquilizarse.

—Se que es difícil todo esto, pero tenemos un plan o teníamos un plan para escapar— empezó a explicar el rubio mayor —Pero tu y yo arruinamos ese plan— a excepción de Sasuke rieron un poco, realmente así era.

En ese momento se escucho el teléfono de Naruto, este se paró para poder contestar alejándose de los presentes, colocandose a lado de una ventana, la llamada no duró mucho, apenas unos minutos, mientras los otros se quedaron en silencio, al terminar la llamada solo se quedó viendo por un breve momento hacia la ventana, deseando poder saltar y librarse de todo, suspiro.

—Era mi padre— dijo regresando a lado de todos —ya sabe sobre el escape y quiere pruebas de disciplina, para mañana a primera hora— dijo por último, tratando de disimular su enojo, cosa que no logro.

El azabache mayor suspiro —Sasuke se que esto es difícil de asimilar pero ahora necesitamos hacer algo muy importante y necesitamos que pongas de tu parte— él azabache menor trago saliva —En cuanto podamos volveremos a reunirnos para hablar de que todo quede aclarado por completo— dijo mirando fijamente al menor este solo asistió con la cabeza —Naruto— dijo por último, esperando que el mencionado entendiera a lo que se refería.

—Tengo algo planeado, pero...— hizo una pausa —Sasuke, lo siento...— dijo al borde de las lágrimas, no quería seguir con todo esto.

—Esta bien, se lo que viene, ahora los cuatros estamos en esto, solo...— trataba de encontrar las palabras correctas para decirlo — solo quiero salir de esto lo antes posible— dijo por último.

—Bueno, quería que primero te tranquilizaras un poco aquí que hay privacidad— dijo el rubio menor —pero no se podrá, para mantener la mentira de que Itachi y yo hacemos lo de la tradición tenemos que entregar pruebas cada cierto tiempo o cada que algo sucede, cómo el escape—

—De acuerdo, ya entiendo— dijo el menor con una vos temblorosa.

—Lo tomaste muy bien— dijo Deidara — lo que esperaba de ti— dijo para acercarse a abrazar al menor —Podremos salir de esto ¿Vale?— dijo con una sonrisa que logro tranquilizar al menor.

Después de unos minutos Sasuke y Naruto se dirigían a la casa del último.

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¿Quieren un capítulo de cómo fue lo de Itachi y Deidara?

El trato de dos familiasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora