APRENDIENDO A COMO AMAR (Momoe Sawaki X Tn)

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Narrador

— Momoe, despierta.

___ trataba de despertar a Momoe, ya que habían llegado a la casa de la más alta.

— ¿Qué pasa?

Contesto algo adormilada la pelirroja.

— Hemos llegado a mi casa — la contraria asintió.

Ambos bajaron del coche con ayuda del chófer.

— Gracias. — Momoe hizo una reverencia hacia el mayor, la cuál fue devuelta.

— Gracias a usted por venir con la señorita.

Momoe no había entendido por qué es que le había dicho eso, pero decidió no preguntar.

Ambas chicas siguieron caminando hasta la puerta, la cuál fue abierta por una chica adulta, llevaba un uniforme de maid que llegaba hasta los talones, tenía el cabello café atado en una coleta

— Oh mi, señorita, estaba muy preocupada por usted, pensé que había pasado algo. — Dijo abrazando a ____.

— No te preocupes Nana — correspondio el abrazo — estaba con una amiga.

Ante esas palabras, la muchacha volteo a ver atrás de la chica, dándose cuenta de que en ese lugar se encontraba Momoe viendo todo.

— Me alegra mucho que hayas empezado a convivir como lo hacías de pequeña, — dijo separándose del abrazo y dirigiéndose  hacia donde se encontraba Momoe — mucho gusto, mi nombre es Emmily, me alegra que sea amiga de la señorita.

— M-mucho gusto.

Momoe aún no entendía nada, estaba tan impresionada de que su amiga viviera en una enorme mansión, que tenía una fuente en medio de su gran jardín con hermosos rosales.

Emmily las hizo pasar a ambas, ya empezaba a hacer frío.

Por dentro había una gran escalera que se dividía en dos, y en medio, un hermoso retrato dónde aparecía ___ con los que la pelirroja supuso eran sus padres.

Momoe siguió admirando todo.

— ¿Dónde estabas?, Nos tenías preocupados.

Se escuchó la voz de una mujer, la cuál venía bajando las escaleras agarrada de la mano de un hombre

— Fui de compras con unas amigas.

No era una mentira, pero tampoco era toda la verdad.

Tu padre se había puesto frente a ti para darte tu abrazo de bienvenida, como siempre hacia cuando regresabas de la calle, y también lo hacían cuando el regresaba del trabajo, al darte el abrazo, se percató de que estabas siendo acompañada.

— ¿Y está linda señorita?

Pregunto algo desconcertado, ya que nunca llevabas personas a la casa.

— Ella es Momoe Sawaki, una de las chicas con las que fui de compras.

—Mucho gusto, señor y señora Aizome.

— El gusto es nuestro, verdad querida — respondió amigable tu padre.

Tu madre no dijo nada, se le veía en la cara que Momoe no le había agradado.

— ¿Y que compraron?, No veo que tengas bolsas con cosas — tu madre empezó a atacar con preguntas, como siempre hacia a la hora de traer gente. — De seguro que no comp...

No la dejaste terminar.

— Te equivocas, por supuesto que compramos.

Chasqueaste los dedos, llegó un chico cargando unas cuantas cajas y bolsas.