LOSE CONTROL 《Lando Norris》

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Narra Tessa:
Ya han pasado 3 días desde aquella noche. Hoy tengo que irme al campamento.

Me estaba poniendo la ropa, cuando olvidé por completo que su habitación era la que daba a la mía y mis cortinas estaban abiertas apenas.

Que horror.

Al terminar de alistarme me fui directamente a desayunar, me hice un café y preparé unas rodajas de pan con mantequilla.

Luego tomé mi mochila y me fui. Cuando salí afuera estaba Lando en el auto mirándome y uno de los chicos de aquella noche, acaba de salir de su casa.

A los segundos el auto de Thomas se hizo presente en el frente de mi casa. Mi novio me sonrió y no me quedó de otra que hacer lo mismo.

Estos días no me ha estado hablando como antes, nose porque, pero supongo que mucho trabajo.

— amor —llegó a mi saludándome con un pico rápido— ¿Cómo has estado?

— hola, bien...¿y tu? ¿Por qué no me has hablado estos días? —se separó de mi yendo al auto y mi vecino ya no encontraba ahí.

— mucho trabajo —asentí— ¿tu hermana, tu familia están bien? —volví a asentir— ¿estás lista?

— si, de hecho recién estaba por salir para la universidad —dije subiendo a su auto— ¿me llevas? porqué llego tarde

— si mi princesita —recordé a mi vecino diciéndolo y sonreí. Facundo sonrió pero yo no lo hacía por él. Esto es raro.

Narra Lando:
Cuando esta mañana salía de mi casa, la vi. De hecho la miré cuando se estaba cambiando, me estaba levantando para irme a la escudería.

(......)

Luego de mis entrenamientos, fui a casa para tratar de ver mi auto que estaba algo descompuesto. Estaba lo más tranquilo cuando la vecina de en frente se me acercó.

— oh ¿Cómo le va? lo siento es que estoy ocupado con esto —dije disculpándome por no saludarla como debía.

— no te preocupes ¿será que tu mamá esté en casa? —asentí.

— sí, venga ella está adentro —la guié y volví nuevamente a lo mío.

(.......)

Narra Tessa:
Estaba justo saliendo de la Universidad, había un viento terrible, para acompañar ese pésimo día.

El campamento se suspendió.

Estaba acomodando mi cabello cuando en eso pude observar a mi vecino en frente, apoyado a su auto.

Este chico me confundía.

Estaba muy cómodo hablando con una chica. Jamás la había visto por aquí. Parecía adinerada. En fin, bajé un escalón más y alguien me chocó.

— oh, lo siento —dije y observé a mi compañero.

— oh, no es nada Tess —dijo sonriendo— ¿te vas a casa ya? —asentí— esta bien nos vemos

— adiós.

— ¡oh, Tess! ¿Cómo estás? —sonreí.

— Bien Cisca ¿y tu? —sonrió.

— bien, gracias —sonrió— ¿quieres que las llevemos? —sonrió refiriéndose a mi y a mi hermana.

Se habían vuelto muy amigas.

— no, no quisiera molestar de verdad...—ella rodó sus ojos.

— ¡LANDO! ¿¡PODEMOS LLEVAR LAS CHICAS A SU CASA!? —preguntó a los gritos y me sentía apenada.