El despertar con un mensaje de texto es grande. Despertar con un mensaje de texto de la mujer por la que has caído es fenomenal.
-Buenos días, no puedo esperar a verte. No podía dejar de pensar en ti anoche.*
Mi sonrisa no podría ser más amplia. Tengo una sesión de tutoría con ella hoy, ella y yo solas... aunque... tengo que tener cuidado. Si alguien se entera, podrían arrancármela de las manos más rápido antes de pudiera gritar '¡No!'
-Buenos días Wanda, igual yo, y no puedo dejar de sonreír*
Me metí en la ducha rápido y me perfume para ella. Salí corriendo a ver el otro mensaje de texto, la única razón exacta por la que estaba corriendo.
-Aww, Eres adorable.
Puedo preguntarte algo.
¿Puedes por favor bloquear el teléfono?. Elije una clave segura y que nadie sospeche, ni Carol, ni Bruce... nadie, amor lo siento pero es necesario*
Me llamó ¡amor! ¡Estoy muerta!
-Por supuesto.*
Deje mi teléfono sobre la mesita de noche y comencé a vestirme. Vestí una falda corta y un top revelador. Sí, yo iba a torturarla y lo iba a disfrutar.
•••
Entré a su clase y me senté, subí la cremallera de mi chaqueta y luego esperé su llegada. Cuando ella entró, llevaba una gran sonrisa y yo no pude evitar sonreír también. Miró a todos los estudiantes hasta que finalmente llegó a mí y mantuvo el contacto de ojos más tiempo que con los demás. Me sentí especial.
-Buenos días chicos, trabajo en parejas hoy. Van a leer el pasaje en estas hojas de trabajo. - Tenía un montón de papeles en las manos. - Van a trabajar juntos para encontrar las respuestas a las preguntas sobre estas otras hojas de cálculo. - Señalo otras hojas. - Chicos muévanse junto a sus socios por favor, gracias.
Agarré mi bolsa y me acerqué a su mesa mientras ella repartía los trabajos a la clase, miré por encima de mi hombro y vi su mirada en mi trasero, que estaba apenas cubierto por mi falda. Sonreí y me senté a su lado, esperando a que ella regresara.
-Buenos días, Natasha. - Sonrió mientras se sentaba.
-Buen día. - Sonreí.
Echó un vistazo a la clase que trabajaba en silencio, demasiado silencio.
-Chicos, si quieren escuchar música mientras trabajan, lo voy a permitir. - inmediatamente cada estudiante sacó su móvil y auriculares.
-Muy lista. - Le dediqué un guiño coqueto y hable en Inglés para estar seguras.
-Bueno, me conoces. - Me devolvió el guiño.
-Ja! así que, ¿que voy a hacer hoy señorita Maximoff? - Sonreí.
-Tú vas a estar hablándome hoy. Te haré una entrevista.
-Ufffffff... ¿Hace calor aquí? - Dije de la nada, abanicándome la cara con la mano. Ella negó divertida y yo instintivamente tome el cierre de mi chaqueta y lo baje lentamente. Vi sus ojos lanzados inmediatamente a mi escote que ahora estaba totalmente expuesto para ella. Su expresión me divirtió mucho y vi como tenso la mandíbula.
Llevo su teléfono debajo de la mesa y sonreí cuando mi teléfono vibró un poco después.
-Chica mala*
No podía dejar de reír y ella sólo se giro hacia mí y apoyó la cabeza en su mano, cubriéndose la cara lejos de los estudiantes antes de mirarme con más comodidad.
Le envié un mensaje respondiéndole al suyo, la vi reírse entre dientes cuando su teléfono vibró y abrió el mensaje.
-Pervertida.*
-Entonces, tú no debes jugar conmigo de esa manera ni ser una tomadora de pelo. Tu ropa básicamente me pide que te mire y te mire.*
Lamí mis labios y sonreí cuando vi sus ojos como dardos en mis pechos, deteniéndose allí, con el ceño fruncido y dándose la vuelta. Recibí otro texto después.
-Realmente estás haciendo esto muy difícil para mí, señorita. ¿O ese es el plan?*
Sonreí coquetamente y ella lo vio. Envié un texto de vuelta.
-No te gustaría saber ;)*
Tan pronto como ella vio el mensaje de texto, me congele. Ella había puesto su mano en mi rodilla desnuda y estaba haciéndome cosquillas con las uñas, de mi rodilla... hasta mi muslo... viajando a la cara interna de mi muslo, todo esto pasaba debajo del escritorio.
Ella estaba cada vez más cerca y más cerca... yo ya no podía soportarlo, me estaba excitando. Me levanté de un salto, alarmando a todos los estudiantes en el salón. Toda la clase, junto con Bruce me miraban con interrogante sobre sus caras, se me ocurrió señalar al suelo y decir que había un bicho. Toda la clase sabía de mi miedo a los bichos así que comprendieron y siguieron trabajando.
Volví a sentarme mientras miraba a cierta persona que estaba tratando de controlar una risita, saqué la silla debajo de la mesa y escribí de nuevo.
-¡Guauu! ¿Quieres jugar de esa manera ¿eh? Hecho.* - Tan pronto como abrió el mensaje la oí reír. ¿No me cree?
Usé mi pierna y empecé a frotarla en su muslo de arriba a abajo con mi rodilla. Pude sentir su contracción casi de inmediato.
Mi mano serpenteo un camino hacia su pierna y de inmediato comencé a masajear la cara interna de su muslo, justo al lado de su centro. Oh Dios... mi corazón latía tan rápido, estaba tan cerca de ella y disfrutando cada segundo de tocarla. Le clavé las uñas y le aruñe de arriba a abajo su pierna, oí un gemido cuando mi dedo meñique rozó accidentalmente contra su bragas. Tan pronto como lo oí, saque mi mano fuera, frustrándola.
-Si tu juegas, jugaré de vuelta querida*
No me respondió ese texto. ¡Te tengo!
•••
Tan pronto como la clase termino, todos se fueron, y Wanda comenzó a empacar.
-¿A dónde vas? Tenemos tutoría. - fruncí el ceño.
-¿Tu casa aún está libre?
-Uh, si...
-Entonces vamos ahí.- dijo y salió del salón de clases. Mierda. Ibamos a mi casa.
La seguí hasta el aparcamiento, entré a mi coche y esperé que subiera al de ella. Arranqué y Wanda me seguía. Fue un viaje largo y duro especialmente cuando miraba hacia su coche y veía cierta mirada en sus ojos.
Pronto llegamos y me detuve en el camino de la entrada, Wanda detuvo el suyo justo frente de la casa en la carretera. Salí del auto y cerré la puerta, justo para que en ese instante Wanda se lanzara contra mí, la mirada de sus ojos la entendía ahora, era como una especie de depredador. Corrí rápidamente a la puerta de mi casa. Cuando logre abrirla, no pude reaccionar, me empujo adentro y cerró la puerta de un golpe.
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Lujuria Oculta; ScarletWidow
Fanfic"Si al entrar al salón de clases me hubieran dicho que mi vida cambiaría para siempre, no lo hubiera creído" Natasha Romanoff Linda, popular y muy heterosexual, no tiene ninguna preocupación en el mundo. Bueno, eso fue hasta que conoció a la nueva m...