Capítulo 8.

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"─ Que carajos te importa. "

Simplemente se quedó en su mente, sus ojos se encontraron con los molestos ojos de su esposo, quien cruzaba sus firmes brazos y endurecía la mandíbula con tal de retener lo que sea que fuese a soltar. Y de cierta manera, que Park ChanYeol hiciera eso... Le molestaba, y de sobremanera, ¿Quién se creía este sujeto para hablarle así? No es como si fuese el esposo perfecto, sólo era un estúpido hombre que jamás de los jamases le sacaría de la duda, que no tenía las fuerzas suficientes para sostenerse el par de bolas que se cargaba y decir "Si, BaekHyun me di al barman." O "No BaekHyun, eso no es lo que pasó."

─ ¿Dónde carajos estabas, Byun BaekHyun? ─ insistió el que tenía el anillo en juego en su mano izquierda, acercándose al más bajo. ─ Más de 60 llamadas, te he dejado mensajes, puse a medio crucero a buscarte... ¿Dónde estabas? ─ agregó al mirarle desde lo alto, mirar como Byun se hacía pequeño, sus hombros se sostenían en lo alto, y su mirada agachada sólo daban a reflejar que sentía un ligero miedo. ─ ¡¿Dónde carajos estabas?!

─ ¡En primera, bájale a tu maldito tono de voz! ─ La voz del mayor resonó por las paredes de la habitación, ChanYeol... ¿Había escuchado bien? ¿Eso había sido la voz alta de su esposo? Hace muchos ayeres que BaekHyun no le alzaba la voz, ni por muy enojado que estuviera. Y sin dudas, sabía que estaba muy molesto, sus pupilas ni rebotaban estáticamente al mirarle, estaba mordiendo la parte interna de su labio inferior mientras ganaba una postura más firme ─ Bájale, Park. ─ agregó de nuevo con un volumen más estable y tranquilo. ─ Lamento si te preocupe, estabas muy ocupado al tratar a tu paciente en emergencias, y sé que es tu trabajo, nuestra prioridad siempre van a ser nuestros pacientes. Pero, estaba aburrido, las actividades no fueron llamativas, me salí sin permiso del barco y vagué por la playa en la madrugada, fue difícil volver a entrar al barco, mi teléfono murió y ni como avisarte.

ChanYeol, sólo hizo una mueca con sus labios, y rodó los ojos demostrando que estaba molesto, ni se diga de sus brazos sosteniéndose en lo alto, parecía que el de orejas llamativas no iba a caer en ese cuento. A lo que a BaekHyun le daba risa.

─ ¿Por qué pones esa cara? ¿A caso no me crees? Pues no sé que tan sucia tienes la consciencia para pensar no sé que cosas. Supongo que por algo lo estás diciendo. ─ sus labios de movieron al cruzarse de brazos también. ─ Desde hace unos días estás raro, te enojas fácilmente, te levantas en la madrugada, y regresas después de horas, a ver. ¿Dónde carajos has estado? Me pides explicaciones, ¡Yo quiero saber dónde has estado estas madrugadas! No es que puedas ir muy lejos, ¿o sí? ─ Byun estaba siendo rudo con su esposo, o al menos eso pasaba en su cabeza. Al menos en algún rincón de la existencia Byun le hacía frente por primera vez a su esposo desde que las cosas no avanzaban bien entre ellos.

Pero no era su realidad. De ser así posiblemente ya no habría mucho que contar, la decaída de una relación tan duradera y "firme" hubiera caído a la velocidad de un meteorito que tuviese la capacidad de destruir al mundo.

─ Estaba muy preocupado, perdóname, sólo me exalté un poco... en realidad me asusté. Que te caíste por accidente, que caíste al mar y te comió un tiburón o aún peor ¡Que alguien te hubiera raptado! ─ ChanYeol expuso su preocupación al acercarse lentamente a su esposo y tomarlo por los hombros. ─ Si te pasa algo, yo no sé que sería de mí. No podría si no estás tú.

El castaño entre los brazos del más alto sólo pudo suspirar y abrazar a su gusto a su esposo; pensando por qué Park ChanYeol creía que raptar a alguien era peor que te comiera un tiburón. Aun así, había dado en el clavo. ─ Nadie me raptó, tonto. ─ soltó al reírse, reírse por la opción donde la probabilidad resultaba ser absoluta; un hombre lo había "raptado", lo llevó a la playa, bailaron, se cogieron tan bien en un hotel... ¡Ah! ¡Un completo sufrimiento! ─ Lamento ello, cariño, mira nada más esa cara, no dormiste nada... al igual que yo, dormir en una banca no es lo más recomendable. ─ agregó al fingir que su espalda baja le dolía. ─ Te amo, lamento preocuparte así. ─ susurró al sostener las mejillas ajenas y besar tenuemente los labios del más alto.

L'Amant Magnifique [ SeBaek ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora