D E S I R E

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A la mañana siguiente la ojos rasgados despertó cubierta del pecho por la sábana. Después de aquella "bienvenida" que le dio Levi quedó cansada y con dolor de cabeza, no solo por la intensidad; al tener el cabello largo Levi se lo jalaba.

  - ¿Qué es esto?

Sobre de ella estaban varias prendas.

  - A esto se refería. Vaya una nota.

"Mujer, esta es la ropa que usarás para estar segura aquí. Puedes quedarte en la granja y preparar los caballos para las exploraciones.
A las 5 nos reuniremos, ve a desayunar"

La ropa era misma que Levi usaba para sus entrenamientos, era fácil colocar la primer parte, las ligas eran lo complicado.

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Mikasa salió de la habitación del bajo caminando por los pasillo, gracias a la luz de ese dio rápido con la cocina a diferencia de la noche anterior.

  - ¿Tu eres Mikasa verdad?

Por un momento se asusto, creyendo que sabían de dónde provenía.

  - Si soy yo
  - Soy Sasha, el capitán Ackerman nos dijo que había una nueva recluta
  - Mucho gusto, vengo de... Rose, de ahí me recluto
  - La cuidad Rose es muy linda. ¿Quires carne?
  - C-carne....

Los ojos de Mikasa brillaron aceptando lo que Sasha le ofrecía.

- Parece como si fuera la primera vez que la comes
  - Lo es... Bueno, me refiero de obtenerla gratis y no por un costo elevado...
  - Si tienes razón, es muy escasa pero es un manjar.

Ambas comían en la cocina, solo eran las únicas en ese lugar.

  - ¿Dónde están los demás?
  - En entrenamientos, yo estoy a cargo de la cocina, ¿Y tú?
  - Me asignaron a los caballos
  - No es extraño del capitán, siempre mandando a las más bonitas ahí
  - ¿Yo...soy bonita?
  - ¡Por su puesto¡ ¿Nadie te lo decía?
  - Bueno, de otra manera despectiva.

Y tenía razón, ella sabía que era muy hermosa, pero la opacaba su trabajo con Mami, solo recibir apodos sin algún cumplido.

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Mikasa cepillaba el pelaje de un caballo café, era un tanto pensado el trabajo.

  - ¿¡Cómo le hiciste para que no te coman la cabeza esos bastardos?!
  - eh...
  - Perdoname, soy Gabi. También estoy cargo de estos cabrones, pero siempre quieren comerme la cabeza.
 

Hacia una leve sonrisa al verla pelear con un caballo mientras cargaba baldés de agua ata darle de beber.

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Su primer día fue ligero, lo único malo era al olor que le quedaba al finalizar el día.

  - Ni te atrevas a entrar así a la habitación
  - ¿Porque no?
  - Los gérmenes son lo peor para mí, vete a bañar
  - Para eso necesito ropa.

Levi le cerró la puerta sin dejarla entrar, Mikasa foco la puerta pero este no la dejaba entrar.

  - Ten, vete a bañar asquerosa

Le boto la ropa en la cara volviendo a cerrar la puerta. Por el hecho de su pasado no merecía que la tratase así.

Mikasa fue a las regaderas de la legión, pero tuvo que esperar para tomar el baño tranquila.
Dentro de la gran bañera se hundía hasta casi su boca, tenía miedo de que alguna otra chica entrara y viera los tatuajes que tenía en la espalda.

La puerta de las regaderas se abrió y se sumergió rápidamente quedando a 3 metros viendo hacia arriba. Era Levi quien la buscaba.

Cuando logro ver qué se alejo de la bañera salió a la superficie recuperándo su respiración.

  - ¿Dónde estabas?
  - Aquí estaba Levi

Levi se desnudo y entro a la bañero donde estaba, pero alejado de ella.

  - ¿Qué me ves?
  - Este es el de mujeres Levi, ¿Eres una acaso?
  - ¿No viste los horarios?
  - ...
  - En la tarde es de hombres y en la noche de mujeres, pasando las 12, es mixto..

Mikasa debajo del agua se tallaba el cuerpo para irse rápido a la habitación, no quería al menos estar cerca de el que no fuera en la habitación.

  - ¿Ya te vas?
  - Si, ya estoy limpia para entrar a la habitación
  - El hecho que estés en mi habitación no quiere decir que estés lejos de mí fuera de este
  - ¿A no?
  - Solo disimula y listo.

Mikasa tomo la toalla y se cubrió con esta aunque la sumergiera con ella y fuera inservible para sacarse.

  - ¿Porque te cubres? Te he visto hasta el apellido mujer
- Si quieres que pase desapercibida, nadie debe ver los tatuajes
  - Vete ya, espérame en la habitación. No te quites nada ni te pongas algo para cubrirte

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En la habitación Mikasa busco toallas secas y cubrirse con estás, dejando la mojada en la ventana.

  - Ya se para que quiere que esté así, para follar pero no será está noche.

Se colocó el conjunto de la ropa interior tenuandi la toalla encima para que nadie la viera.

  - ¿Que te dije sobre cubrirte?
 

Levi la tomo por detrás por el cabello, jalandoselo y lastimandola al tenerlo muy largo

  - Déjame, mi cabello me duele...Levi ya...
  - Si quieres vivir tienes que obedecerme.
 

La boto de cara contra la cama quitándole la toalla y su ropa interior.

  - Te dije que solo estarías aquí para complacerme.
 

Le propinó doble bofetada por ambas mejillas, dejandoselas rojizas.

  - Si me hubieras obedecido, no sería necesario esto Mikasa.

Ligeramente las lágrimas de Mikasa brotaban poco a poco, sin embargo Levi no se detuvo.