CAPITULO #3

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Lan Wangji no se sentía contento de estar embarazado, fue una noticia muy inesperada que nunca en su vida se hubiera imaginado. Si bien sabe que su segundo género es omega, no se esperaba tenerla capacidad de concebir puesto que durante toda su vida ha vivido siendo una persona que no desprendía feromonas, ni mucho menos ha pasado por ciclos de calor, salvo esa única vez que Wei Wuxian se aprovechó y lo dejo embarazado.

El problema no era él bebe que tiene en su interior sino la persona que lo ha tenido como su prisionero durante muchos años, ese alfa que lo desprecia y lo humilla en todo momento, que no se cansa de decir lo mucho que lo odia mientras lo tiene sometido debajo de él. Por supuesto que en la mente y el corazón de Wei Wuxian no existe el perdón ni mucho menos la compasión hacia la persona que lleva su hijo. Pero ¿Qué podía hacer? Un hijo suyo ya estaba creciendo dentro de él y no dejaba de pensar en los grandes cambios que pasaría de ahora en adelante.

Desde ese entonces Lan Wangji había activado un sistema de alerta para cualquier peligro que sentía. El gran joven maestro el mejor en su generación, Hanguang Jun, ya no existía, ahora solo era un omega sin núcleo espiritual que espera un bebe.

En el pasado siempre creyó que moriría solo, sin nada más que el título de consorte imperial del Patriarca que se le otorgo en contra de su voluntad. Morir sabiendo que sus grandes hazañas, inventos y fama se pierdan con el pasar de los años. Pero quien hubiera imaginado que dentro de poco nacerá un bebe suyo y que ya no se sentiría tan solo como en los últimos años.
Claro, eso dependerá de cuanto lo proteja y no dejar que Wei Ying haga algo en contra de ellos.

El hecho de que su padre sea un tirano asesino le preocupa mucho, no sabía de lo que podía ser capaz si se enteraba que la persona que más odiaba en su vida estaba esperando un hijo suyo. Desde hace mucho le dejo de importar si moría en manos de él, pero ahora la situación era diferente, no quería que su bebe pague los problemas de otros, no tiene la culpa de nada. A pesar de la difícil situación, se había tomado la promesa de protegerlo con su vida.

A partir de ese momento decidió no salir mucho del Jingshi, no quería encontrarse con Wei Wuxian fuera de su refugio, lugar donde se sentía más cómodo y protegido; por supuesto había veces en que su instinto lo sometía a regresar al ropero de Wei Ying y volver a armar su nido pero era imposible, no quería enfadarlo y sentir el mismo dolor de perder su pequeño lugar donde por única vez se sintió protegido.
Para calmarse un poco, se hundía en la cama para acurrucarse y abrazar su vientre.
Como omega, al encontrarse en su estado era natural que le crezca la necesidad de estar al lado del padre de su hijo.

Necesitaba sus feromonas para disminuir su ansiedad y miedo al peligro. No era algo que le gustaba ni mucho menos deseaba por lo que realmente sufría grandes cambios. No podía disfrutarlo.

Un día, decidió salir del pabellón. Sin darse cuenta termino cerca del imperio de Wei Wuxian por mucha casualidad y siendo nada agradable para Lan Wangji se terminó encontrando con Wang LingJiao. Ambos cruzaron miradas Lan Zhan tenía la intención de darse la vuelta y alejarse de ella lo antes posible, pero la emperatriz lo detuvo con su voz dulce pero al mismo tiempo arrogante.

- Consorte imperial Lan, me es grato encontrarlo – Por supuesto la alfa no estaba para nada contenta de verlo, sus palabras eran todo lo contrario a lo que pensaba. Ya son muchos años de tener que soportarlo, sobre todo el odio que creció en ella al darse cuenta que su esposo lo prefería a el antes que a ella. En realidad no entendía que clase de sentimientos existían entre Lan Wangji y Wei Wuxian, pero de tan solo saber que el patriarca se entrelazaba con él la mayoría de las noches, le llenaba de ira y celos después de todo se trataba de un hombre beta
Lan Wangji volteo para inclinar su pecho como saludo, su mirada seria no cambio en absoluto. Sus ojos brillaban como el sol, al igual que su piel clara. Su postura como siempre era elegante y estilizada además de que su ropa blanca le daba la apariencia de ser un hermoso dios viniendo de los cielos. Wang LingJiao realmente le tenía mucha envidia, porque a pesar de ser una de las bellezas más deseadas de todo el reino, el mismo Wei Wuxian había perdido todo su interés en ella.

EL BEBÉ DE LA CONSORTE IMPERIAL « Adaptacion » (Terminada) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora