|🐍Obanai Iguro🐍|

503 24 0
                                    

—Tú que crees que esté haciendo mal, Uzui.

—No lo sé, tal vez no eres lo suficientemente extravagante para él, aunque yo veo mucha extravagancia en tí.

—Creo que es un muy buen cumplido señor extravagancias, pero aún así no creo que él esté interesado en eso.

Tal vez es porque también quiere que tengas heterocromía, como él.

—Pero yo no puedo hacer eso Uzui, no sé cómo se hace, pero una vez me dijeron que mis ojos cambian a la luz del sol, a ver, ¡ve si es cierto!.

Uzui se acercó a mí para verificarlo, alzó mi rostro hacia el cielo para que me dieran los rayos del sol directo a la cara.

—Entonces, ¿ves algo? ¿Es sorprendente?

—Yo los veo igual, tal vez es con la luz de la luna.

En eso escuché como hablo una voz llena de energía que viene de una gran persona.

—¿¡Qué hacen!? ¡Porque hace que ___-san vea tanto al cielo, Uzui-san!

—Rengoku, que bueno que llegas, pensé que iba a quedar ciega, este menso está más ciego y tonto que el pobre cuervo de Tomioka.

Me acerqué a él, y le comenté lo del sol para que lo verificará.

—¡Se hacen más claros ___-san!¡Seguro que a las personas les llamará mucho la atención esto, que hermoso!

Me emocioné tanto que no me había percatado que en todo ese momento el pilar de la serpiente, al cual le pertenece mi corazón nos estaba observando, pero al momento de que me di cuenta el volteo hacia la dirección del pilar del amor, eso me desánimo.

—Perder los ánimos no es extravagante de tu parte, arriba esos ánimos pilar de la luna.

De repente todos se callaron cuando Oyakata-sama comenzó a saludarnos, dió algunos mensajes de los hermanos Kamado y misiones que los de bajo rango no podían completar. Mientras todo eso pasaba, por mi cabeza se me ocurrían miles de formas para que él me hiciera caso, al terminar la reunión me volví a juntar con Uzui y Rengoku, pero estaba emocionada, porque parecía que mi mente ya había encontrado una respuesta a mis desgracias.

—Sigues muy pensativa, ¿acaso mis palabras no sirven de mucho para los ánimos?

—Creo que por fin tengo una idea, y hablar de tantas extravagancias con esa misma palabra me está dando valor.

—¡Eso es increíble ___-san, yo también quiero hablar de extravagancias y valor, pero primero debemos comer!

—Muy bien pensado Rengoku, pero la que se irá antes que ustedes con ese ser de luz hermoso llamado Obanai Iguro seré yo, hasta luego.

—La extravagancia le está dando poderes, que satisfactorio.

Mientras escuchaba a Uzui hablar con Rengoku a la distancia me acercaba más a lo que sería de mi vida o el peor día o uno de los mejores de todo lo que resta de ella, las manos me sudaban y comencé a tener muchos nervios. Llegué al árbol donde seguía acostado Obanai y comencé a repasar el plan en mi mente, "primero: invitarlo a comer".

—!Segundo: comer algo rico¡, !tercero: decirle que bonito está el día y platicar con él¡, ¡tercero!… No, espera, este es el cuarto, bueno, ¡cuarto: decirle que bonitos ojos tiene!, ¡quinto: hablarle sobre mis sentimientos y esperar por humillación o iluminación!, muy bien ___, todo está perfecto, ahora solo espero que esto no tarde tanto.

Escuché algunas risas, carcajadas y algunas miradas de pena ajena, "Dime qué no lo dije en voz alta" mire alrededor y me di cuenta que si había dicho todo eso en voz alta, prácticamente gritando, "Tierra, trágame por favor", lo único que pude hacer fue echarme a correr, pero no esperaba que me detuviera la persona que debía estar más apenada.

—Espera, ¿no que me ibas a invitar a comer?

—No, o sea si, pero ya no, no quiero, ¡rechazame de una vez por favor!.

—Esto no va según los pasos que hiciste en lo que tú pensabas era tu mente, y al final lo entiendo porque siempre eres muy despistada, pero acepto tus sentimientos y quiero que sepas que son mutuos.

—Exacto, ya sabía yo, siempre observé cómo mirabas a Mitsuri-chan, y deduje que esto iba a pasar, ¿pero sabes qué? Te perdiste de este pedacito de luna que se cayó para poder iluminar a los demás.

Todos observaron el espectáculo, y yo seguía sin poder procesar todo, pero estaba segura de que estos sentimientos se quitarían con un té y dangos.

—Creo que no despiertas aún, pero dije que los acepto y me gustas, aunque no lo captes del todo bien.

—Sigue la humillación, que fue el mal que yo hice para merecer esto, pero está bien…

Seguían riendo y mi cerebro comenzó a funcionar, él dijo que sí, y yo lo rechace por no entender.

—Espera, ¿también te gustó? Mira, la verdad es que estoy conmovida, no puedo ni pensar bien, ¿podrías guiarme a otro lugar para hablar o comer?, creo que es lo que me falta.

—Claro, vayamos a comer algo, yo invito.

—Gracias.

—Por cierto ___, ya había escuchado lo del ser de luz hermoso que era, podrías repetirlo más tarde.

—Claro, solo deja como algo para poder mimarte todo el día.

Caminamos dejando a todos riéndose por la escena que había hecho. Pero al final todo valió la pena, con esfuerzo, motivación, ansiedad y humillación conseguí que por fin me hiciera caso, aunque fuera un manojo de nervios y mariposas en el estómago. Mientras comíamos nos confesamos nuestros sentimientos y cómo nos sentíamos al respecto de que las indirectas que siempre nos tiramos las tomábamos mal y pensábamos que eran para otras personas.

—Entonces… ¿Estabas celoso de Rengoku y Uzui mientras yo lo estaba de Mitsuri-chan?

—Si, un poco, pero dejemos eso de lado porque me da un poco de vergüenza, mejor cuéntame más de ti, me gustan tus historias.

Kimetsu no Yaiba | ~One shots~ |  Donde viven las historias. Descúbrelo ahora