Kimetsu no Yaiba | ~One shots~ |

|🌊 Giyuu Tomioka 🌊|

⛔⛔Spoilers del manga
Espero les guste :)

—Tomioka-san, sabes que el agua y la luna siempre han estado conectadas y siempre hay lindas historias entre estos dos elementos.

—Supongo que es más el mar el que tiene la historia.

—Si, pero el mar es agua, piensa Tomioka-san, piensa.

—A qué viene todo esto.

—Que hoy es un día precioso, y la luna está hermosa, ¿no crees?

—La luna siempre lo está, es muy brillante y cálida.

—Exacto Tomioka-san, me alegra que pienses eso.

Desde lo sucedido en la última pelea que tuvimos todos los cazadores de demonios contra Muzan y los demonios, algunos salieron heridos y hubo muchas bajas que nos cuesta asimilar, aún así, tratamos de seguir con nuestro camino y ser felices por ellos, por mi parte decidí seguir a Tomioka-san y estar a su lado por siempre.

—¿Sabes? Pude haber hecho tu coleta todos los días y no habrías tenido que cortarte tu cabello.

—Así está bien, estoy cómodo, ¿No te gusta?

—Todo en ti me gusta, creo que ya tienes que haberlo entendido.

—Fue suficiente prueba ver cómo te interpusiste entre el ataque de la luna superior tres y yo, pero no lo vuelvas a hacer nunca.

Estar juntos, entrelazando nuestras manos, mientras acaricio su cabeza que está apoyada en mis piernas es algo reconfortante. Pensar que estoy en mi finca, dónde antes pasaba tiempo con los pilares que ya habían fallecido y que anteriormente se me conocía como la pilar de la luna, ahora es más que un recuerdo de tiempos dónde solo se podía ser feliz a la luz del sol, recuerdos que son lindos y tristes, y me hace estar llena de nostalgia.

—¿Puedo pasar?

Volteé para observar quién era nuestro invitado de imprevisto, sonreí al ver a Sanemi con una bolsa que desprendía un buen olor.

—Claro, siempre eres bienvenido aquí.

—Gracias ___, pero solo pase para dejarte esto, creo que arruine su momento.

—Tu siempre arruinas mis momentos Sanemi, no sé cómo le haces, por ejemplo cuando iba a derrotar a ese hijo de ...

—Superalo quieres, eso pasó hace años, no sé cómo no lo superas.

—Además también me ganas en las heridas que tenemos, así yo no puedo.

—___-san, no creo que sea sano competir por heridas en el cuerpo.

—Perdón Tomioka-san, me altere un poco.

—En fin, vine a entregar unos cuantos ohagis que hice, me marcho por hoy.

—Hasta luego, Nemi-chan.

—Eres una maldita, te dije que no me llames así.

—Como quieras, Nemi-chan.

Sanemi se fue dejando atrás algunas amenazas de muerte, resoplidos y maldiciones, me reí un poco al observar sus berrinches. Tomé la bolsa y me comí un ohagi junto con Tomioka-san.

—No sé muy bien cómo funcionan los celos, pero creo que ahorita lo estoy un poco.

Mi carcajada la debió de haber escuchado hasta las cenizas de Muzan, pero es que era imposible no reír después de su confesión, después de que me doliera el estómago de tanto reír y ver lo desconcertado que él estaba regrese a lo normal, dónde sentía ternura y amor incondicional hacia este hombre de ojos azules.

—Sabes que no deberías de sentir celos por Sanemi, nos conocemos desde hace mucho tiempo, y solo puede haber amistad entre nosotros dos, además de que creo que alguien está comenzando a gustarle, pero todavía no descifro quien será la pobre alma en pena.

Él solo me observaba y yo a él, ante la luz de la luna era un ser perfecto para mí, alguien inalcanzable. Se limitó a asentir y volver a acostarse para colocar su cabeza en mis piernas.

—¿___-san me puedes dar un beso?

—¿Un beso sabor ohagi?

Asintió, y yo me limité a concederle el deseo de un beso. Tal vez esto no se acercaba a las historia de la luna y el mar, pero nosotros podemos estar juntos los que queda de nuestra corta vida para juntarnos en la que sigue.