lover boy ; wolfstar

29| Antes

La esperada luna llena había llegado, hoy era el día en donde se transformarían delante de Remus. Habían tratado de mantenerlo del mejor ánimo pero los dolores físicos de Lupin no ayudaban con la situación

— ¿Quieres quedarte acostado? Te podemos traer los apuntes.

— No... si puedo ir -no podía, su dolor de cabeza y cadera lo estaban matando.

— ¿Quieres que me quede contigo? Puedo ir con Poppy y pedir un permiso

Un poco más rendido, el castaño asintió aunque por dentro no quería, volvió a acostarse mientras se quejaba. Sirius se fue un momento y luego de un rato volvió con un poco de comida, una crema y pastillas que le había dado Poppy para Remus, ella sabía que los chicos sabían de su condición y era mejor para todos que se quedara entre ellos

Cuando Sirius volvió, Remus sollozaba en las mantas mientras se cubría de la luz. Black cerró todas las cortinas y también las de la cama, con él ya dentro, se sentó en la cama y le dió la pastilla al licántropo

— Tienes que poner esto en tu cadera. Lo puedo hacer yo pero si no te sientes cómodo-

Remus sin dejarlo terminar se destapó y bajó un poco su pijama dejando descubierta la zona en donde Sirius aplicaría el producto. Con suavidad Black tomó la crema entre sus dedos y la esparció por toda la cadera de Lupin escuchando pequeñas quejas, cuando terminó guardo todo y Remus se volvió a subir el pijama.

— Gracias -dijo el castaño- Deberías ir a clases, ya me ayudaste mucho

— Puedo perder un día de clases Moony, puedo seguir cuidándote y James traerá todos los apuntes

— Sólo mantente en silencio

Con una sonrisa Sirius sólo asintió y se puso detrás de Remus para abrazarlo y ver que nada interrumpiera su sueño. Black sólo pensó que podría hacer esto el resto de su vida y lo haría feliz

• • •

James y Regulus habían aprendido a ser más discretos de lo que creían, pero ahora que Sirius no había estado por los pasillos, se permitían alguna sonrisa o mirado siempre y cuando no hubiera alguien cercano cerca

Se habían metido a un armario para verse y hablar un rato. Habían terminado las clases y James no podría verle esta noche

— Y Barty hizo explosión su caldero -dijo Regulus emocionado- No le quitaron puntos porque fue un accidente, aunque todos sabemos que no

— Te diviertes mucho para verte tan callado -respondió James riendo- Ya tengo que irme, le tengo que llevar unas cosas a M... Remus

— Ajá, ustedes y su amado Remus, Sirius es igual que tú con su amor a este Remus. Primero eras tu y ahora él, no entiendo la verdad

— ¿Estás celoso de Remus? -el mayor tenía tantas ganas de reírse pero sabía que lo metería en problemas, le causaba gracia como a veces Regulus sacaba celos de cosas pequeñas.

— ¿Qué? ¿Celoso de un me...? -se detuvo, no podía decirlo, no enfrente de James- No estoy celoso de tu amigo, sólo quiero pasar un rato más contigo

— ¿Nos vemos mañana?

— Torre de astronomía -murmuró Regulus mal humorado.

Potter besó sus labios y salió del armario fijándose que nadie lo viera. Faltaba poco para la luna llena, estaba nervioso, tenía miedo pero también sabía que Moony no estaría solo y eso lo tranquilizaba. Subió hasta la habitación y no estaba nadie más que Remus y Sirius, ambos durmiendo abrazados y con la habitación a oscuras, era una imagen adorable a los ojos de James pero debía despertarlos o Lupin no llegaría a la casa de los gritos

— Hey... -les susurró moviéndolos suavemente- Chicos...

— Sh... -susurró Sirius- Le duele la cabeza.

— Está anocheciendo —al escuchar eso Remus abrió de inmediato los ojos y se levanto asustado- Tranquilo, faltan algunas horas pero creo que necesitas prepararte

Lupin se vistió rápido y sin decir nada mientras que Sirius le miraba con preocupación aún en la cama. Cuando terminó de vestirse se quedó unos minutos mirando por la ventana hasta que volvió a la realidad

— Me voy -dijo sin ánimos, igual que cada vez que se iba- Nos vemos mañana

— Moony -le llamó Sirius- Je t'aime beaucoup et je suis vraiment désolé de ce que nous allons faire

— Español por favor

— Nos vemos, no te enojes mucho

No entendiendo lo último, Remus se fue odiando este día como todos los meses