- ¿Señor Xiao?
La voz era vana.
- ¿Señor Xiao?
Un empujón empezó a despertarlo.
- Necesito que salga de la habitación, por favor.
Ahora lo enfoca con claridad. El rostro del doctor Ayanga frente a él, pidiendo que saliera de ahí. Al parecer, Yibo tenía los signos vitales alterados y necesitaban averiguar por qué.
🔸️🔶️🔸️
Pasaron quince tortuosos minutos para Zhan, esperando en la sala. ¿Qué habría sucedido? ¿Habría desestabilizado de cierta manera a Yibo? ¿Volvía a ser culpa suya todo? Tenía el puño en los dientes, pensando qué clase de mal aire traía consigo que Yibo no lograba recuperarse, sino contrariamente, empeoraba. ¿Qué trataba de decirle el destino? ¿Qué no tendría una segunda oportunidad ya?
Permaneció sentado hasta que Xuan Lu y Yubin llegaron con él.
- ¿Qué sucedió? - preguntó el pelirrojo.
- No sé. El doctor llegó conmigo y evacuaron el cuarto, yo, dios, me quedé dormido - dijo con tono lastimero el menor.
- Hey, no pasa nada - dijo Xuan Lu, dándole un abrazo. - Seguramente, Yibo está un poco trastabillado y necesitaban revisarlo.
- ¿No estaba inestable cuando estabas ahí, Zhan?
- No, se veía muy pacífico. Temo haber apretado sin querer algún botón mientras dormía, ¿Habrá sido eso?
- No te culpes, A-Zhan habló firmemente Xuan Lu. - Escucha, tú has apoyado a Yibo más que cualquiera de nosotros, incluso recibiste a Yan Li y Qing en tu casa. Eres un amigo excepcional, así que, sea lo que pase adentro no es por ti.
La puerta se abrió y apareció Ayanga con un semblante extrañamente calmado. Se dirigió al trio.
- Acaba de despertar - anunció con una sonrisa. - Aún está un poco conmocionado, así que podría serle útil ver algunas caras familiares. Traten de no hacerlo hablar, le acabamos de quitar el tubo y le dejamos una mascarilla de oxígeno. Tampoco sabemos qué tantas secuelas ocurrieron, así que debemos ser discretos.
El corazón de Zhan palpitó irregularmente, a tal punto de creer que ahora se desmayaría. Pero no, debía tener fortaleza por... ambos. Aunque estaba nervioso, pues el personal médico y de enfermería lo conocían como la pareja del pelinegro.
Su emoción rebasó cualquier miedo, al pensar que podría oír la voz poco a poco de ese bobo.
- Le llamaré a Yan Li para que venga - dijo Yubin, caminando al teléfono público.
Los primeros que vería Yibo después de varios días de estar inconsciente serían solo a Xuan Lu y Zhan, pero podía bastar como principio.
Ambos hermanos siguieron a Ayanga, quien les abrió la puerta. El menor fue con paso veloz para poder mirar a su... ¿Pareja?
Yibo estaba mirando sus manos, moviendo los dedos; subiendo y bajando la mirada, tratando de analizar lo que estaba alrededor suyo. Su cansancio era evidente, la enorme mascarilla cubría la mitad de su rostro, pero dejaba notar esos ojos que tanto adoraba Zhan, quien caminó hasta los pies de la cama. Xuan Lu y el doctor solo quedaron a un lado de otro, esperando a que el hombre supiera a quienes tenía enfrente.
El castaño sonrió de lado, casi siendo precavido con la reacción del mayor. Intercambiaron miradas como la primera vez que se conocieron, en medio de la cocina de esa casa de campo. Yibo le devolvió una sonrisa genuina, como si fuera un niño feliz. Quizás, la mascarilla no la dejaba notar, pero Zhan lo supo.
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Estos niños
RandomXiao Zhan, padre soltero, se debe enfrentar a Wang Yibo, otro padre soltero, debido a una pelea de sus hijos. Sin embargo, debido a la química de sus padres, estos niños forman un pacto para juntarlos. ADAPTACIÓN. Esta historia no me pertenece.