DC - Después de la Tormenta

Chapter I

"¡Shinichi! ¿Dónde vas tan deprisa?

La joven estudiante todavía no había tenido tiempo ni de recoger sus cosas. Se encontraba guardando su estuche en su mochila cuando vio que su compañero de clase ya estaba a punto de salir por la puerta.

"¿Es que ya no te acuerdas que habíamos quedado?

"Aah..¡Perdona, Ran!

El joven estudiante se detuvo justo en la puerta cuando estaba a punto de marcharse. Dio media vuelta y se dirigió a su compañera con una sonrisa bobalicona en su rostro al mismo tiempo que rascaba su nuca.

"He recordado que tenía que ir a casa del Profesor a ayudarle en una cosa… ¡Nos vemos en otra ocasión!

"¡E-espera, Shinichi!

Pero Shinichi ya no volvió a detenerse otra vez. El joven detective se marchó corriendo por los pasillos dejando a su compañera algo desolada allí en mitad de clase. Todos habían empezado a marcharse ya mientras de fondo se escuchaba el reloj del instituto anunciando el final de las clases por hoy.

"¿Otra vez ha vuelto a hacer lo mismo?

Ran miró a su derecha al escuchar la voz de su compañera acercándose.

"Este Shinichi.. regresa después de tanto tiempo y ahora se dedica a ignorar a su esposa…

"Pero.. Sonoko, ya sabes cómo es.

Ran dejó escapar un pequeño y casi insonoro suspiro.

"Siempre va de un lado para el otro, resolviendo casos y ayudando a los demás…

"¡Pero tú también le necesitas!

Exclamó Sonoko colocando sus manos sobre su cintura.

"Al final acabaré dándole un buen golpe de puño para que se de cuenta… ¿No se supone que lo vuestro ya era oficial?

" Después del viaje a Kyoto, sí.. pero ya sabes que tiempo después volvió a llamarme para decirme que por el momento lo mejor sería darnos un tiempo… - dijo Ran algo entristecida.

"Pero.. ¿Qué se supone que significa. “darnos un tiempo” para ese maniático de las deducciones?

Exclamó Sonoko alzando un poco la voz.

"¿Es que no habéis estado separados suficiente tiempo ya?

"No lo sé, Sonoko… apenas hablamos estos días así que ya no sé qué es lo que pasa por su cabeza.

Ran desvió su mirada algo apenada.

"Sinceramente, ya no sé qué es lo que siente.

"Anda… vamos. Te invito a un helado y hablamos tranquilamente, ¿Qué me dices?

Ran dibujó una pequeña y débil sonrisa sobre sus labios y asintió en silencio. Después las dos chicas se marcharon. A Sonoko no le gustaba nada ver así a su amiga y siempre intentaba hacer lo posible por animarla. 

-Profesor, ya estoy aquí.

 Cuando Shinichi llegó a casa del Profesor Agasa, lo encontró con un extraño casco sobre su cabeza. El casco emitía tanto luces de diferentes colores como irritantes sonidos. El joven detective prefirió ignorarlo para no tener que hacer alguna pregunta sobre la utilidad de dicho casco.

 "Ah.. Shinichi, eres tú.

El profesor se quitó el casco para recibir a su vecino.

"Has llegado muy pronto. Pero estás de suerte, ya tengo arreglada tu pajarita.