El Último Camino

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Muchos son los lugares que en mi vida he recorrido, incontables atardeceres que mis ojos han vislumbrado con un lamentable sentimiento aturdido, las dolorosas llagas que mis pies soportaron a lo largo de las vías del destino, son muestra de mi esperanza que aún vive con la ilusión de encontrarte en este último camino.

Realmente no entendía el llanto de mi espíritu y camine para buscar algo que lo callara, mas una delicada brisa del Sur me susurra -¡oh! Pobre bardo, no sonrías con esa triste cara- y comprendí que solo buscaba tus ojos, tus labios y el calor de tus delicadas manos para completar mi mundo de ilusiones y danzar las melodías que recitan mis poesías mientras cantan alegres nuestros corazones.

Veo las estrellas y pregunto al universo ¿donde está mi rosa amada que aun no la alcanza este inútil verso?; y es que aun caminando con esa pregunta en mente, recorrí los senderos de este basto mundo sin saber donde estas y quien eres realmente; pero eso ahora es lo de menos pues seguro estoy que al encontrarte caminare a ti
con mi último aliento para este gastado amor poder entregarte.

Se que estas rimas son incoherencias de mi alma, pero que mas da, si en las veredas de la vida aprendí que la lógica solo existe en los pensamientos de quienes buscan la calma, más mi calma solo la encuentro en mi loco mundo donde yacen estos versos que nacen con el dulce beso del alba.

Versos de un vagabundoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora