Uno

95 6 3
                                    

La semana pasó rápido, Taehyung había regresado a su casa junto a su madre, claro que ella estuvo pendiente de él con las recomendaciones con la nutrióloga, más eso no fue importante para el pues todo consistía en comidas y comidas que lo hacían engordan más de tres kilos al día.

El estaba bien, pero podría estar mejor si no seguía las recomendaciones de la nutrióloga, lamentablemente su madre se encargaban de verlo comer y no podía siquiera dejar unas granos de arroz.

Soltó un suspiro mientras se veía en el espejo, su figura no era algo de lo cual podía sentirse orgulloso, pues poco a poco engordaba y no podía detenerlo.

-Tae, hijo -volteo hacía su madre poniéndose el polo de inmediato- Me tengo que ir a trabajar, volveré cerca de las ocho ¿Bien?

-Si ma, ve con cuidado.

Se despidió de su madre con un beso en el cachete, hasta que ella se fue y fue a ponerse unos pantalones cómodos, espero unos minutos para ver si su madre volvió, al no hacerlo corrió fuera de la casa y así hasta el parque.

Si quería bajar de peso rápido, debía hacer ejercicio.

Y no descansaría hasta lograrlo.







[ • • • ]


Volvió antes de las ocho a su casa, al verse sudado se metió a bañar está vez con agua tibia pues ya se había bañado antes de salir de su casa.

Al salir se puso su pijama que no era pijama si no un polo y pantalón suelto, su madre llegó minutos después con una bolsa blanca en manos.

-¿Que es eso ma? -preguntó con curiosidad-

-Traje caldo de gallina, la señora de la esquina prepara delicioso, te encantará.

Sonrió forzadamente, le molestaba que su madre lo obligue a comer lo que sea, solo lo hacia para darle gusto a su madre y lo suelte de a pocos, claro el tomaba sus precauciones.

Todos sus esfuerzos en correr durante horas, se fueron al caño.

[ • • • ]

Estaba preocupada, Taehyung no paraba de correr y ejercitarse durante horas, el creía que no lo veía, pero no era haci en realidad, yo había pedido un mes de vacaciones en mi trabajo y estuve al pendiente de él. Siempre me he dado cuenta de las sonrisas forzadas y los leves ataques de pánico que lograba controlarlos el mismo, odiaba el estado de mi hijo, mi único hijo.

Y haría de todo por ayudarlo a curarse, el doctor me había recomendado varios sitios que lo podrían ayudar, me había contactado con todos los sitios, y había uno el que me había encantado su tratamiento.

«Centro JoSu» el nombre era un poco raro, pero era diferente porque no solo se encargaban de las personas con problemas alimenticios, si no de diferentes problemas, ya sea psicólogos, físicos y sociales.

Era una manera de mantener amistades y apoyarse entre si de buena manera.

Era una decisión que no tome a la ligera, se trataba de la salud mental y física de mi hijo, se trataba de estar alejado de mi hijo durante un buen tiempo, pero estaba en juego su bienestar.

Así que la decisión que había tomado todas lo hubieran hecho, pero no saben lo difícil que es aceptarla.

Había aprovechado que Taehyung estaba libre, pues sus temas de colegio lo habían agobiado y ahora, le dije que saldríamos a pasear, y el acepto.

-¿A dónde vamos exactamente?

-Que te -solte una ligera risa antes de sacar entre insistencias a mi hijo y subirlo al auto.-

-Enserio ma, dime, dime, dime.

-Tranquilo, es...sorpresa -una sorpresa que no sería agradable para ti y posiblemente te enojes conmigo, pero quiero que estés bien-

Arranque el auto y seguí el camino hasta el centro SoJu, no estaba lejos pero tan poco cerca.

-¿Que hacemos aquí? -los nervios de Taehyung los note, solté un suspiro suave antes de hablar.

-Tengo que recoger unas medicinas. Vamos de ahí saldremos a la feria -sonreí, una sonrisa triste que disimule, la indecisión en Taehyung era notable, tome su brazo y lo jale despacio dentro del lugar.

Apenas entramos nos dirigimos hasta la sala de espera que era un cuarto, no había nadie, solté un suspiro antes de sentarme con Taehyung en el mueble.
Inconscientemente deje un beso en su cien. Podría considerarlo como una feliz despedida antes de que el se enoje.

El doctor del lugar apareció, me miró con una sonrisa compasiva y me pare mirando a Taehyung quien entendió y se levantó.
Seguido de eso más señores con bata blanca aparecieron, Taehyung se puso nervioso y se apego a mi brazo, solté un suspiro, sin darme cuenta lágrimas cayeron por mis cachetes hasta que Taehyung se puso atrás de mi.

-Ma-mamá ¿Que sucede? -me voltee hacía el tomando su rostro por sus mejillas, apoye su frente con la mía- Ma-mamá no..

-Lo siento cariño -la voz rota de mi hijo solo hizo que las lágrimas aumentaran, deje un beso en su nariz ante de separarme de él. - E-el está listo

Los hombres de bata tomaron a mi hijo de los brazo para evitar cualquier escape, Taehyung se desespero haciendo fuerza por liberarse mientras de igual manera lloraba.

-Llevenselo

-¡Mamá no! ¡Mamá, suéltame, mamá! ¡Mamá no me dejes! ¡Mamá! ¡Mamá!

Trague aquel nudo doloroso en mi garganta aguantando mis ganas de querer detener a mi hijo.

-¡Mamá!

Todo esto es por tu bien hijo.

Luz De Mi Vida [Taekook]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora