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Hola, soy Harry Edward Styles y bueno, creo que esta es mi vida. 

Tengo dieciséis años y aunque vaya al instituto con muchas personas a las que solo les importa qué tipo de bebida pueden tomar esta noche, o qué paquete de condones les van a salir más baratos, he podido encontrar a alguna persona interesante.

Conocí al que hoy es mi mejor amigo: Zayn, siempre entre pinceles. A mi gran amigo Niall, quien lleva la música en las venas. O al chico de mis sueños...

Louis William Tomlinson, capitán del equipo de fútbol; chico más popular del instituto y novio de Eleonor Calder; capitana de las animadoras. Se conocieron cuando el ojiazul marcó en un importante partido y ella saltó a sus brazos, besándole, sin que se conocieran apenas. Solo coincidieron y se besaron. 

El público gritó y aplaudió mientras que las lágrimas caían por mis mejillas. 

Esa noche Zayn, Niall y yo vimos "Mean Girls", mientras comíamos helado de galletas con chocolate en el sofá de mi casa. Nos pusimos trajes de boda, simulando una escena de Friends, donde Rachel, Mónica y Phoebe estaban en la posición que imitábamos nosotros. 

Sí, somos muy fans de la serie. 

Porque sus ojos azules; su pelo castaño y liso;  su sonrisa resplandeciente y su risa encantadora, me habían enamorado cuando yo solo tenía 14 años.

                                                                                     💙💙💙

Ese día era mi primer día en mi actual instituto. Acababa de mudarme a Doncaster y no tenía con quien juntarme. 

Recuerdo lo mucho que lloré en el baño después de que nada más presentarme, el imbécil de Richie se riese de mí, animando a sus amiguitos. Lloraba abrazado a mis piernas en una cabina del baño, cuando alguien entró y contuve mi llanto asustado. Los pasos de alguien resonaron en el baño y el sonido del grifo se hizo el protagonista en aquel espacio en el que me sentía aprisionado. 

Justo cuando el agua dejó de correr, inconscientemente un hipo salió de mis labios, frenando los pasos que poco a poco se alejaban. Los pasos volvieron a escucharse más cerca y pararon en mi cabina, unos golpecitos contra mi puerta hicieron uso de presencia.

-Hey, ¿estás bien? 

Rompí a llorar asustándole.

-Hey déjame entrar si quieres y hablamos, ¿si?

Abrí la puerta todavía con las piernas entre mis manos, con algo de miedo, desprotegido. El chico bajó hasta estar de cuclillas para verme la cara. Me miró dulcemente y ahí pude verle por primera vez. Sus ojos, su pelo y las facciones de su cara, su bondad...Ahí fue la primera vez que vi a Louis. Me sonreía mientras acariciaba mi mejilla.

-¿Ya?- dijo dándome cariño con su pulgar.

Sin darme cuenta mi respiración ya estaba calmada y no había lágrimas en mi pálido rostro.

-¿Quieres explicarme qué pasó? Bueno si te apetece, intentaremos buscar una solución- me volvió a sonreír, aunque no había dejado de hacerlo desde que cruzó aquella puerta.

Asentí tímido y le conté todo lo que me había pasado con Richie. El me escuchó, dejándome hablar, tranquilamente, y cuando alguna lágrima se me escapaba, el la apartaba. 

-Ese imbécil se ríe de ti porque te tiene envidia. No debes hacerle caso, solo quiere hacerte daño. Demuéstrale que sus comentarios no pueden contigo, sé que es difícil, pero inténtalo. Tú eres mucho más que esos insultos, vales mucho más que ellos- Sonreí y el hizo lo mismo, regalándome una última caricia en mi mejilla.

Over AgainDonde viven las historias. Descúbrelo ahora