Mi Destino

Capítulo XVIII

Valentina: Doctor, quería hablar con ud.

Doctor : Dígame señora Valdez.

Valentina: Quiero traer a mis hijos para que la miren, tal vez eso le ayude a salir más rápido del coma.

Doctor : Señora Valdez, no está permitido el ingreso de menores de edad al área de terapia intensiva.

Valentina: Doctor, por favor solo seria una vez, ellos aun no saben nada y me gustaría que por lo menos ellos la puedan ver.

Doctor : Señora Valdez, por esta ocasión daré mi consentimiento para que sus hijos puedan entrar a verla.

Valentina: Gracias doctor, iré hablar con ellos,  salí del hospital y me dirigí hacia mi casa, por lo menos los periodistas ya no estaban ahí, ya que mi familia se había encargado de hacer una rueda de prensa y dar los por menores del accidente.

Al llegar a la casa me dispuse a darme un baño, para luego hablar con mis hijos.

Santy y Elena vengan mis Amores tengo que hablar con uds algo muy importante.

Niños: Dinos mami, que pasa.

Valentina: Mis amores, tengo que hablar sobre su mami Juliana, ella sufrió un accidente y se encuentra hospitalizada, por eso tuvimos que viajar de emergencia, he conseguido que uds la puedan ver hoy, mami esta un poquito mal de salud y nos necesita fuertes, tenemos que darle ánimos para que ella sane pronto.

Elena : Mami, pero mami Juliana va a estar bien.

Valentina: Si mis amores, mamá estará bien, cambiense para que la puedan ir a ver.

1 hora después

Valentina: Llegamos al hospital, mis hijos, saludaron a su abue Lupe, luego ingresamos a la habitación donde se encontraba, mis hijos al verla comenzaron a llorar y a besarla, fue una escena muy triste.

Santi: Mami, te amo, eres fuerte y se que estarás bien, pero abre tus ojitos, quiero verlos.

Elena: Mamita, me escuchas si lo haces quiero decirte que eres la mejor madre que me pudo dar Diosito, eres una mujer que siempre buscas la manera de hacerme feliz, te admiro por tu forma de ser, pero hoy te pido que luches por vivir, que Santi, abue, mami y yo te necesitamos y te amamos.

Valentina: Mis hijos estuvieron por un tiempo más con ella, hasta que llegó la hora de despedirse, ellos continuaron llorando y deciendole que la amaban y que rezarian para que ella estuviera bien.

Salimos de la habitación, los niños se despidieron de su abuela y Guille se los llevó hacia la casa, esa noche le propuse a Lupe que fuera a descansar que yo me quedaría cuidándola, un poco regañadientes ella aceptó.

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