La decisión más difícil

Capìtulo 9

  SARA

(2004)

Kate conoce a Taylor en el hospital estando los dos enganchados al gota a gota, sentados uno junto a otro.

-¿Tú para qué estás aquí?- le pregunta ella, y yo inmediatamente levanto los ojos del libro, porque en todos los años que Kate lleva recibiendo tratamiento como paciente externa no puedo recordarla iniciando una conversación.

El chico con el que habla no es mucho mayor que ella, tendrá a lo mejor dieciséis. Ella tiene catorce.

-Me llamo Taylor.-Le ofrece la mano-.Leucemia mieloide aguda.

-Yo me llamo Kate.Leucemia aguda promielocítica.

-Oooooh-dice-.Una rareza.

-¿No lo somos todos los que estamos aquí?

Me quedo pasmada contemplando la escena. ¿de dónde ha salido esa ligona? ¡Esa chica que está coqueteando con ese muchacho no puede ser mi hija!

-Qué haces cuando no estás en el Hospital de Providence?- le dice Taylor.

-Esperar a que pase algo que me haga volver. Siempre hay algo: o mis plaquetas están bajas, o necesito que me hagan algunas pruebas, nuevas sesiones de quimioterapia....

-A lo mejor alguna vez podríamos esperar juntos. ¿Puedo pedirte tu número de teléfono?

Kate garabatea el número mientras el aparato intravenoso de Taylor empieza a pitar.Viene la enfermera y le descuelga el cable.

-Tienes que irte ya, Taylor-le dice-. ¿Donde está tu silla de ruedas?

-Abajo, junto a la escalera. Bueno Kate ya te llamaré.

Cuando se han marchado, Kate deja escapar todo el aire retenido con un suspiro.

-¡Oh, dios mio. Es guapísimo!

La enfermera sonríe, mientras comprueba el paso del gota a gota de Kate.

-Y que lo digas tesoro. Si yo tuviera treinta años menos...

Kate se vuelve hacia mí, radiante.

-¿Crees que me llamará?

-Seguro que si.                      
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Kate está en el baño mirándose en el espejo. Se lleva sus manos a su cabeza rapada.

-Mamá,¿tu qué crees que ve Taylor cuando me mira?

-Yo creo que ve a una chica que sabe por lo que él está pasando.

-He estado buscando en Internet información sobre la enfermedad que tiene Taylor. Tiene un índice de curación bastante alto.-Se vuelve hacia mí-. Cuando te preocupas por si otra persona va a sobrevivir más de lo que te preocupas por el túnel de la garganta.

-Exactamente eso.

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Kate y yo estamos de nuevo en el hospital. Le tienen que someter a su quinta sesión de quimioterapia.

De repente aparece Taylor.

-¿Cuánto tiempo llevas?-le pregunta a Kate.

-Acabo de empezar.

Taylor se levanta y se sienta en el brazo de la silla de Kate, cogiendo en el regazo el recipiente para los vómitos.

-Cien pavos a que no aguantas hasta las tres sin echar la primera papilla.