"I think I'm lost" dijo mi mente en un tono con acento inglés, fracasando estrepitosamente en el intento obvio. Paré de comer, es estúpida, mira que no me di cuenta eh... solo tengo una historia con muchas entradas, estados en mis redes y toda estupidez del proceso. Solo eso, ya sabes, me sobra tiempo. En fin, a veces es desesperante hablar con ella. Quiere ser graciosa pero saca mi más sarcástico lado. Para tonterías siempre estamos, no hay de otra. Obvio empezamos a discutir y todo el rollo y... simplemente es una de esos empleados que son adictos al trabajo, no puede parar de formular preguntas, frases, recordar cosas, imaginar experiencias y así, bien ingeniosa ella, todo el día. Cuando le dices a un drogadicto que pare de drogarse, que no es sano. Todos sabemos su respuesta. Pues mi mente es más de lo mismo. A veces me cuesta seguirle el ritmo, a ver... es muy bonito y todo, pero a veces me pilla en momentos inoportunos. La dejé ser por mucho tiempo hasta que vi que por sí sola no iba a parar. Adicción se llama. Entonces empecé a ingeniarmelas para autodisciplinarla, si eso ya es casi imposible para lo físico.. imagina lo mental. Y seamos sinceros, sólo la tuve que convencer una vez, las demás estaba encantada ella. Antes estaba yo en algo importante y ella en su mundo, y así con todo. E incluso me dejaba y se iba a no sé donde.
Una pequeña introducción al mundo interno que tenemos las personas que sobrepensamos las cosas y para colmo, PAS. Efectivamente ya me encontré, pero son bonitos los rastros que dejé en el camino, a su manera.
Y qué bonito es entenderse.
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Memorias De Un Alma En Pena
Non-FictionEsta vida mundanal... que a veces caótica y otras mágica.