With You (YoonMin) [Terminada]

Capítulo 9

HoSeok escribió la clave antes de entrar en su casa cuando escuchó su nombre, a su costado se encontraba YoonGi. Asustado se coloco una mano en su pecho, su reacción hizo sonreír al otro que se acercó negando con su cabeza. 

-Casi me matas del susto.-espetó. 

-Lo siento, ¿Vienes llegando recién?.-miró su reloj.-Son casi las dos de la madrugada.-agregó. 

El dueño de casa no dijo nada y entró a su departamento dejando entrar a su amigo tras él. Dejó su chaqueta sobre el sillón y se giró hasta YoonGi.-¿No es muy tarde para venir a verme?.-preguntó cansando. 

-Parece que vienes de una fiesta.-comentó con las manos en sus bolsillos. 

-Claro que no.-negó.-Me quede hasta tarde a beber con un amigo.-mintió. 

YoonGi percibió su mentira pero simplemente fingió que no sabia.-Seguro. 

-¿Quieres algo de beber? tengo algunas cervezas.-pero YoonGi se negó. 

-Gracias pero, aun tengo que levantarme temprano mañana.-comentó.-Adiós. HoSeok le regalo una sonrisa forzada y asintió. No quería tener que mentirle a su amigo pero tampoco era justo revelar lo sucedido a Jimin, después de todo, ellos ya no tenían nada que ver y para él eso estaba bien, todavía estaba interesado en conquistar a Jimin. Y no se rendiría tan fácil. 

                                                                                 (...)

-Gracias por acompañar me, incluso en tu estado.-puchereo TaeHyung. 

-Ya no digas más, a cambio me debes una comida.-recordó. Su amigo sonrió. 

Saliendo del cajero, TaeHyung cruzó su brazo con el de Jimin dispuestos a subir al auto.-Eh, Es YoonGi.-se detuvo. Jimin entró en pánico. 

Efectivamente era él. Lo segundo que no quería era que YoonGi le viera así. 

-Vámonos.-se apresuró Jimin. Todavía estaba lejos pensó. 

-Creo que viene hacia aquí.-Comentó. Jimin arrastró a su amigo.

-Rápido, rápido.-pidió. 

YoonGi apresuró el paso hasta llegar a ellos.-¡Jimin!.-lo alcanzó. Pero este no se giró. 

-Lo siento YoonGi, llevamos prisa, hablamos luego.-Abrió la puerta del auto. 

-Será cortó, necesito preguntarte algo.-pidió. 

-No, ya te dije que no puedo.-Soltó bajando su cara. Sin embargo YoonGi fue más rápido y lo tomó del brazo, este se giró mostrando su rostro. Jimin tenia la cara hinchada, su labio partido y alrededor de su ojo una mancha oscura. 

Sorprendido de verlo en ese estado, tomó su mejilla.-¿Qué te paso?.-Pero Jimin se soltó. 

-Nada.-negó mirando hacia otro lado. 

-¿Cómo que nada?, tienes el rostro como si te hubieran golpeado Jimin, ¿Quién te hizo esto?.-Quiso saber. Realmente estaba preocupado por él. 

-No es nada, no tienes que actuar así.-soltó. Aunque fuera bueno con él, esperaba que no lo hiciera, no quería tener que decirle a su tonta cabeza, que solo era por amabilidad. 

-Fue un asalto.-Confesó TaeHyung ganándose una mirada molesta por parte del afectado.-Perdón.-susurró. 

-¿Un asalto? ¿Cómo sucedió? ¿Ya lo reportaste a la policía?.-sus preguntas solo molestaron más a Jimin.

-Por favor YoonGi, esto ya pasó, estoy bien ahora, así que no necesito que hagas tanto escandalo.-soltó. 

-Hablas como si fuera tan simple, mira tu cara.-parecía molesto igual. 

-Créeme, es lo ultimo que me preocupa.-mintió.-Si quieres hablar algo del caso, agéndalo con Yun, hasta entonces, adiós.-Cerró la puerta y se encerró dentro del carro. 

YoonGi dejó escapar un suspiro y le envió una mirada a TaeHyung. 

-Ya nos vamos.-avisó. 

-TaeHyung. Solo quería decirte que lo del caso, no es nada personal.-agregó. 

-lo sé, es tu trabajo, yo entiendo.-asintió. 

Cuando el carro partió los ojos de Jimin se llenaron de lagrimas pero se negó a llorar. Ni siquiera estaba seguro de la razón de estar tan sensible, quizás porque se moría de ganas de contarle a YoonGi lo asustado que se encontraba, lo feliz que le hacia saber que aun era importante en su vida y lo molesto que también estaba consigo mismo por permitirse esos sentimientos, cuando ambos ya no eran nada, nada más que dos personas que se divorciaron.  

TaeHyung miró a su amigo mientras aceleraba el auto. 

-¿Estás bien?.-Temió preguntar. 

-Es humillante.-confesó el chico con voz baja. 

-YoonGi parecía en verdad preocupado por ti Jimin.-el mencionado cerró los ojos triste. 

-Por favor TaeHyung, no quiero escucharlo, ¿Sabes cuántas veces he tenido que oír su nombre estas ultimas semanas?.-volteo a verlo.-YoonGi esto, YoonGi lo otro, estoy cansado y tengo ganas de llorar y ni siquiera sé porque.-sollozó. 

-Lo siento...

                                                                                       (...)

La sonrisa nerviosa de su secretaria Yun, le dio a entender que la persona que lo buscaba no era alguien bienvenido. Dejó de lado sus papeles con cuidado cuando fijó su vista en quién lo buscaba. Lee Hwan Joon. El bastardo estaba frente a él de nuevo y con una sonrisa divertida. 

-No tengo tiempo para usted, sea cual sea el motivo de lo que quiera decirme, por favor agéndelo primero.-Habló con calma. 

-No sea descortés, abogado Park.-Se sentó en el sillón y pasó su mano por el. 

Jimin pasó saliva ocultando su cara en los papeles. 

-Que bien le quedan los adornos en el rostro.-Su comentario heló a Jimin por completo. 

-¿Qué es lo que quiere?.-preguntó finalmente hartando sé. 

El mayor se acomodó colocando sus manos sobre sus rodillas. 

-Tranquilo, vine en son de paz.-Avisó.-Entiendo que las cosas no están de la mejor manera pero no por eso, tenemos que volver la situación peor.-Agregó. 

-No estoy entendiendo.-Habló. 

-TaeHyung necesita el trabajo, puedo dejar que vuelva con la condición de que retire el cargo, soy consciente de que los horarios en Seúl no son tan flexibles como para apiadarse de un titulo como el que él posee.-aseguró. 

Jimin asintió. Esto sobrepasaba lo absurdo en totalidad. 

-Nunca me rindo, eso ya lo sabes.-recordó. 

-Tengo una mejor idea.-sonrió Jimin con falsedad. 

-¿Así?.-Se interesó él. 

-¿Sabe lo que puede hacer con su propuesta?, guardarla por donde mejor le entre.-La sonrisa del mayor cambio bruscamente a una seria.-Ahora quiero, que se largue de mi oficina y que no me vuelva a buscar, nos veremos las caras en juicio.-advirtió. 

El hombre se levantó y sacudió sus ropas.-Cuidado con ser tan arrogante y altanero, a veces la vida se lo cobra muy caro a uno o a quienes queremos.-advirtió. Jimin apretó el botón para llamar a su secretaria. 

-Yun, trae a seguridad, por favor.-El hombre le guiño un ojo y salió de la sala. Jimin tembló por algunos segundos y luego se sentó sobre la silla. El cable de su teléfono se encontraba desconectado, por suerte nada malo sucedió. 

¡Gracias por 1K! :3