𝘼𝙢𝙤𝙧, 𝙧𝙚𝙘𝙪𝙚𝙧𝙙𝙖𝙢𝙚 ; 𝙅𝙞𝙢𝙞𝙣

Capítulo 16

Continuación. 

Soobin: Que divertido fue —dijo soltando una carcajada cuando llegaron al departamento—

Tu: Eres un inconsciente

Soobin: ¿Yo?

Tu: ¿No te cabe en la cabeza que te peleaste con un policía? ¿Y si hubiera sacado un arma?

Soobin: Ni tiempo le di de sacar nada, solo lo empujé y se cayó solito —te cruzaste de brazos—

Tu: No sé por qué te da tanta risa, acepte salir contigo, pero en lugar de disfrutar la cena me la echaste a perder

Soobin no dijo nada solo te miro desconcertado y se fue sin decir una sola palabra, 30 minutos el teléfono del departamento sonó y contestaste.

(Llamada)

Tu: ¿Bueno?

Sr.Park: Hola ____________ —sonreíste— ¿Estará mi hijo por ahí? —frunciste el ceño—

Tu: ¿Jimin? pero si me dijo que iría a visitarlo

Sr.Park: Que raro, aquí no ha venido —apretaste un puño—

Tu: Oh, seguramente le entendí mal

Sr.Park: Si llega le dices que me llame por favor

Tu: En este preciso momento va llegando —viste como llego Jimin con una maleta cargando en brazo derecho—

Sr.Park: Mejor mañana hablo con él, cuídate querida

Tu: Igualmente —colgaste—

(Fin de llamada)

Jimin: ¿No saliste con Soobin? —dijo disimulando—

Tu: Claro que si... oye ¿Y cómo está tu padre?

Jimin: Bien bien, de echo fuimos a cenar —asentiste sarcásticamente—

Tu: ¿Por qué no dejas de mentirme?

Jimin: ¿Mentirte?

Tu: Acaba de llamar tu padre preguntando por ti

Jimin: Esta bien, no fui a verlo ¿o qué? ¿Tengo que informarte de todo lo que hago? solo fui a recoger esto —mostro la maltea y se tocó el brazo izquierdo que fue el que se golpeó cuando Soobin lo empujo—

Tu: ¿Por qué te tocas ese brazo? ¿Estás bien?

Jimin: Si si estoy bien —siguió tocando su brazo—

Tu: ¿Enserio? a ver déjame ver —caminaste hacia él, pero de una maniobra le quitaste la maleta— ¿Qué traes aquí? —sacaste la ropa que traía en el restaurante— mira nadamas —sonreíste— ¿Tu eres el policía del restaurante? con razón te me hacías conocido —ironizaste—

Jimin: No sé de qué me hablas —desvió la mirada—

Tu: ¿Ah no? tu nos seguiste hasta el restaurante

Jimin: ¡Pues sí, sí! ¡Me disfracé y los seguí! lo hice para evitar tu "cenita romántica" ¿Y sabes por qué? POR QUE TE AMO, TE AMO —repitió— cada vez que los veo juntos... no sé qué me pasa —tomo la ropa y la aventó al suelo—