Capítulo 51

4 1 0
                                    

Continuación.

Tu: Ya estoy aquí, Taehyung —entraste a su oficina—

Taehyung: Que bueno que llegas —sonrió— necesito que mandes estas cosas —te dio una lista—

Tu: Como tú digas —sonreíste tomando las hojas—

Taehyung: ¿Te parece si primero nos relajamos un poco? —tomo tu mano e hizo que te sentaras en el sofá de la oficina—

Tu: Taehyung... no crees que si quieres que seamos algo... ¿Hay que esperar? —sonreíste—

Taehyung: Tienes razón —sonrió— ¿Te eh dicho que eres tan hermosa? —negaste y aspiro el perfume de tu cuello, reíste ante las cosquillas que te daba—

Tu: Estate quieto —sonreíste y te pusiste de pie—

Ay rayita ¿Tú también? oigan mijitos puro despecho aquí entre ustedes ¿Qué les pasa? bueno ya ya, prosigo narrando.

Taehyung: Hazme un favor antes, llévale estos materiales a Jennie —te dio una bolsa grande—

Tu: Claro que si, Taehyung

Taehyung: Suerte —beso tu mejilla y te fuiste—

Llegaste al salón de artes plásticas y Jennie estaba terminando de pintar una obra, llegaste sin tocar y arrojaste las bolsas en el sofá del salón.

Tu: Ahí están tus materiales —sonreíste falsamente y te diste la vuelta para salir—

Jennie: Hey princesa ¿Podrías ser menos ruda? hay cosas que se pueden romper —sonrió y camino hacia ti—

Tu: ¿Necesitas algo más? —ignoraste completamente lo que dijo— porque ya me quiero ir —te cruzaste de brazos—

Jennie: Revisare que venga todo lo que pedí —comenzó a abrir la bolsa— wow que buenos colores, café —saco un botecito— ¿No te gusta? es maravilloso, el amarillo tulipán es divino —saco otro— verde musgo —sonrió— adoro este color

Tu: ¿Ya terminaste? —dijiste seria—

Jennie: ¿Qué te pasa ____________? yo estoy haciendo un enorme esfuerzo para que nos llevemos bien, anoche te invite a mi departamento, te perdiste una velada increíble —sonrió— la pasamos muy bien Jimin y yo, empezamos en la mesa y terminamos en la cama, estaba muy ansioso y se ve que hace mucho una mujer no le daba una buena sesión de cardio —sonrió cínica y desviaste la mirada— ¿Acaso no te gusta eso? bueno es que no todas las mujeres somos fogosas y capaces de darle eso a un hombre

Tu: No todas, si necesitas más verde musgo me avisas —y saliste de ahí—

Un rato después Jennie salió del salón y aprovechaste para entrar, caminaste hacia la mesa de materiales y tomaste el botecito de verde musgo que le había gustado a Jennie, tomaste un vaso de plástico y comenzaste a verter la pintura ahí.

Tu: ¿Te gusta el verde musgo ____________? —imitaste la voz de Jennie— ay si ¿No es precioso? JA JA JA —seguiste imitándola y su risa también— estúpida imbécil desgraciada —volviste a tu voz normal— yo me voy a encargar de que este siga siendo tu color favorito —preparaste la pintura—

La preparaste con agua y con ayuda de una silla subiste para poner el vaso arriba de la puerta (la puerta del salón era doble) saliste por la otra con mucho cuidado de que el vaso no se cayera.

𝘼𝙢𝙤𝙧, 𝙧𝙚𝙘𝙪𝙚𝙧𝙙𝙖𝙢𝙚 ; 𝙅𝙞𝙢𝙞𝙣Donde viven las historias. Descúbrelo ahora