3

887 95 14
                                    

"El sol es mas cálido en invierno."

Eso fue lo que pensó Wei Wuxian una tarde de invierno, algunos meses e incluso años atrás, mientras él y su hermano, - por palabra, claro, nunca de sangre, el era hijo único, o al menos eso creía - Xue Yang, caminaban por las frías calles, mirando a su alrededor, recordando viejas memorias ya casi olvidadas de lo que alguna vez fue un recuerdo hermoso y efímero. Su infancia, tal vez, era como tener un tesoro perdido con un mapa dañado, es decir, su memoria era una mierda total, olvidaba cosas con facilidad y la mayoría del tiempo no le daba importancia a cosas olvidadas, sin embargo, algo que nunca pudo olvidar fue la noche que perdió todo, culpo a los dioses y maldijo a quien fuera que sus palabras llegaran, aun era una herida abierta para él y para su hermano; por que a esa edad y con esas experiencias, era más de lo que un niño podría llegar a soportar, pero, viéndolo ahora, a su lado, con esa sonrisa que pondría a temblar a cualquiera, pensó, que tal vez y solo tal vez, esa experiencia, no fue del todo mala.

No lo malentiendan, por supuesto que él no quería que todos murieron, no, claro que no, pese a que no hablaba  mucho con los demás niños de aquel tiempo, les tenia suficiente aprecio como para desearles siempre lo mejor y aunque no lo tuviera, tan poco era un bastardo que le desearía el mal a alguien, lo que si le dolió realmente fue la muerte de su shijie, su adorada hermana, - tampoco de sangre, por supuesto - aun guardaba en su corazón y en su mente, sus palabras tan calidad y sus caricias tan suaves, también lamentaba no poder probar sus deliciosas comida una vez más, y entonces pensó en lo duro que fue toda su trayectoria desde ese lamentable hecho, hasta ahora.

Si, había sido un camino de mucho sudor, lagrimas y llanto, recuerda, aunque escasamente, como Xue Yang y él, después de llorar por horas en aquel callejón y que la lluvia los empapara todos, habían tenido que buscar un lugar para dormir, los primeros meses, tal vez tres o más, dormían en una vieja instalación abandonada con no más que una gastada sabana que habían encontrado en algún basurero al azar, para comer, claro, aunque no fuera mucho, hacían trabajos o esperaban a las afueras de algún restaurante decente a que desecharan las sobras de las personas, ugg otro recuerdo llego a su mente, un Xue Yang pequeño de tal vez seis años que vivía en las calles, mucho antes de que su shijie lo encontrara, como, un señor de alma perversa, había convencido a su hermano para llevar una carta como recado, aun se preguntaba como él, con su temperamento, había caído en algo así, aunque para ser justos, el hombre le había prometido delicioso bollos rellenos, y él, que no contaba con algo para comer, había aceptado, por que bueno, era un niño, solo, con hambre, desprotegido y que por supuesto, no recriminaría ni cuestionaría nada, también tuvo que considerar que probablemente en ese entonces nadie lloraría la muerte de un pobre huerfano que no tenia ni donde caer muerto, así que era realmente perfecto usar a un niño tan desamparado como él para.... Para lo que sea que esa vil persona tramara.

El problema radico enormemente en el hecho de que todo había salido mal, la carta, o su contenido, no era más que una ofensa, una amenaza, para alguien con sumo poder, y a pesar de que A-yang era inocente, no se le dejo fuera del "crimen" y vaya, él lo pago, claro que si, y el dolor en su cuerpo más los moretones, era una pequeña muestra de eso, aunque siendo honestos, nada de eso le había importado a este pequeño, él solo quería sus ansiados bollos, pensándolo bien, tal vez no debió meterse, pero si no lo hubiera hecho, jamás habría conocido a una persona tan increíble como su shijie; después de que ese hombre recriminara que era mentira todo lo que había dicho, empujo a Xue yang a un lado de la carretera, se subió a su todo lujoso automóvil y arranco, por supuesto, A-yang no había alcanzado a levantarse para ese entonces, y si no fuera por los rápidos movimientos de su hermana, posiblemente Xue Yang habría perdido uno de sus dedos, si, fue una horrible experiencia para el pequeño, y pensaba, que si realmente no lo hubieran encontrado y él perdía un dedo o la mano por eso, posiblemente se volvería loco y buscaría venganza, incluso podría acabar muerto.

EL RENACER DE LOS HÉROESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora