Yo soy Naruto (Yaoi)

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𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 𝑵𝒂𝒓𝒖𝒕𝒐

La verdad aunque todo esto era en su mayor parte actuado no podía negar que estaba muy sentimental al respecto, había muerto y reencarnado en naruto, el cual no vivía la gran vida, que aunque el la serie solo mostraron que era dejado de lado, puedo ver que realmente no todo lo que miras es cierto... 

Secando mis lagrimas mire al zorro el cual aunque ya hace rato que había echado a los invasores, no me aparto de el, algo que realmente agradecí.

-Es momento de que hablemos de las condiciones del trato- dijo llamando mi atención

*tarareo*

-  yo te daré la libertad que pueda darte dentro o fuera de mi mente sin morir creo que los demás términos no serian nada de otro mundo, yo trato de no molestarte y  darte  entretenimiento, tu me entrenas y me brindas el conocimiento que tienes acumulado de todos tus años existenciales-

-Veo que tienes las cosas claras- 

-Realmente no lo había pensado con claridad, tal vez en un futuro pedir ayuda con respecto al entrenamiento que llevaría, tal vez tratar de cambiar mi espacio mental para tu comodidad... principalmente tenia claro que quiero llevarme bien contigo, no por tu poder o cualquier otra cosa, si no que, al momento de ver la serie podía ver como no estabas contento por estar encerrado tras una rejas, vi como te juzgaron sin siquiera conocerte, todo gracias a alguien que solo te utilizo para fines egoístas -

El silencio inundo mi mente, realmente sabia que mis palabras no podrían ser aceptadas completamente por el... pero me sentía completamente bien con que el supiera realmente como lo veía y mi perspectiva sobre el asunto de su presencia dentro de naruto.

La oscuridad de la mente me inundo, mire por ultima vez al zorra para despues solo dejarme llevar.

𝑵𝒂𝒓𝒓𝒂 𝑵𝒂𝒓𝒖𝒕𝒐

Cuando abri los ojos, la luz de la habitación me cegó por unos momentos, el hospital siempre fue un lugar que desprecie en mi vida pasada, nunca pude estar cómodo en una habitación donde cabía la posibilidad que anteriormente alguien hubiera muerto en ella.

Levantándome un poco para poder apreciar el entorno pude notar como me encontraba en un lugar de "calidad" tal vez por la repentina información difundida de quienes eran mis padres y cuales fueron sus ultimas palabras al momento de su muerte... 

Realmente me molesta la hipocresía de la gente, de los aldeanos que solo ven por su conveniencia.

Suspirando decidí sentir mi alrededor, sabia que naruto podia sentir a una leve medida las firmas de Chakra, pude detectar cuatro esparcidas en las esquinas de la habitación, probablemente algunos anbus para mantener a los que intentaran algo contra mi lejos.

Si ellos ya sabian que estaba despierto probablemente un quinto fue a informarle al tercero.

Mis conclusiones fueron confirmadas cuando la puerta fue abierta y pude ver a sarutobi entrando en ella con sus características ropas de hokage.

Yo solo movi mi mano en señal de saludo, no estaba de animos de hablar, no solo por los acontecimientos recientes, si no que el dolor de las marcas en mi cuerpo eran demaciado fuertes para ser ignoradas de manera fácil.

-Naruto- hablo el viejo- Se que debes de estar confundido, no solo por las noticias recientes, si no porque no te informe de tu ascendencia- volvió a recibir asentimiento mío, con u suspiro sarutobi solo pudo tomar asiento junto a la cama - Como debes saber tus padres fueron muy importantes en nuestro triunfo en la guerra, sus ataques hicieron que las demas aldeas temieran su sola presencia, es por esto que te ocultamos, kumo y iwa no dudarían en mandar a cualquier ninja que estuviera en sus filas para terminarte -

Yo solo pude reprimir un suspiro que amenazaba por salir, no sabia cuantas infinidades de veces leí un fanfic donde daban esa estúpida escusa para que naruto "comprendiera" la razón por la que decidieron marginar a un pequeño, ocultándole lo único que podría hacer que supere la tristeza sin la creencia de que fue abandonado por la misma razón que los aldeanos lo odian.

Desviando la mirada del viejo me dispuse a mirar a mi alrededor, buscando con la mirada a los ambus que se encontraban en la habitación 

Como si el hokage supiera cual era mi intención hizo una señal para que salieran de su escondite, claro captando que prefería no hablar del tema, claro ignoraba si sabia mis razones.

Cuando los ambus estuvieron arrodillados frente al hokage y por supuesto frente mio pude reconocer dos de ellos, la peli morada que muchos tenían la teoría de que kushina la entreno en el kenjutsu, el otro era el ultimo miembro "vivo" conocido del antiguo equipo siete y alumno de mi padre, Kakashi.

Yo al mirar a este ultimo no pude evitarlo y salte para abrazarlo, sin dar tiempo de respuesta por cualquiera que estuviera en la sala, mientras de mi boca salia un "Mio" muy claro para evitar cualquier confusión. 

-Mio mio mio- repetia mientras restregaba mi mejilla en su pecho, podia sentir la confucion del hombre pero la ignore mientras subia abrazándolo como koala y escondía mi cara en su cuello, tranquilizando un poco mi ansiedad que no sabia que tenia al sentir un olor a colonia de hombre.

-Naruto, ¿Podrías soltar a mi anbu?- pregunto el viejo a espaldas mío, claro que yo solo negué con la cabeza, por alguna extraña razón no quería volver a pronunciar palabra en mucho mucho tiempo

"No es tu anbu anciano, es mio"

-Naruto necesitamos seguir hablando y mi anbu necesita hacer sus funciones - volvio a hablar

"El se quedara conmigo, tu tienes muchos ninjas en tus filas, déjame este a mi"

Pude escuchar como el hokage suspiraba, después fui arrebatada de mi lugar y dejado rápidamente en la cama, trate de regresar pero las manos de los otros dos anbus que no reconocí me lo impidieron.

Mis ojos se llenaron de lagrimas. 

Me sentia seguro con kakashi y no en esta maldita cama donde cualquier doctor que tuviera la intención de lastimarme lo podría hacer.

Deje de luchar y solo abrace mis rodillas, no mire a nadie nuevamente y los ignore todo el rato que estuvieron.

"Deberé empezar con el entrenamiento una vez que salga de aquí"