Mía | Ryomen Sukuna

Cap. 32.

Advertencia: Capitulo con contenido subido de tono.

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Sukuna veía a Akane seriamente, ella desayunaba tranquilamente importándole poco la mirada de él.

Akane:-Quieres?-le acerco un pedazo de fruta con el cubierto.

Sukuna:-Ni una palabra de lo de ayer-sentencio.

Akane comió el trozo de fruta y vio tranquilamente a Sukuna, cuando paso el alimento sonrió.

Akane:-Tranquilo no diré nada de qué quieres estar conmigo jejeje-

Sukuna estaba cabreado, recordó completamente lo que hizo y dijo ayer. Quería fingir que no se acordaba de nada, pero ella supo perfectamente que no era así.

Sukuna:-Cállate estúpida mocosa! No creas todo lo que te dije ayer-estaba de muy malhumor.

En toda su maldita vida, era la primera vez que confesaba como se sentía, ahora ella lo vería como alguien débil.

Akane:-jejeje espero que vuelvas a ponerte borracho, me gusto que te comportaras tan lindo conmigo-se burló y siguió desayunando.

Los dedos de Sukuna se tensaron, quería estrangularla, el había caído tan bajo con ella...

Sukuna:-Solo dije lo que cualquier mujer como tu querría escuchar-trato de excusarse-No pienses que realmente soy así-

Ella terminó de desayunar.

Akane:-Si si lo que digas, no diré nada. Solo una cosa... - lo miro serio.

Sukuna hizo lo mismo.

Akane:-Tu sabrás si lo que me dijiste ayer es verdad o no, y si quieres que te perdone no bastara con solo decir "perdón"-se levantó y se marchó.

Sukuna se quedó en la mesa, enojado por haber dicho semejantes estupideces.

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Ahora Sukuna era quien se distanciaba de Akane, ella sabía perfectamente la razón: Quería evitar hablar con ella para que no saliera de nuevo el tema del día en que se emborracho.

Ella le conto a Yuji que el motivo de su distanciamiento era por una "pequeña discusión"; su amigo quería ayudar, ella le pidió que no lo hiciera, tampoco era como si él le hubiera hecho algo malo. Pero extrañaba al pelirosa, y esa sensación fue creciendo más con cada día que pasaba.

Akane ya estaba en su quinto mes y las cosas con Sukuna seguían igual o peor. Ya no la iba a ver, la estaba evitando a toda costa. Ella se sentía deprimida, no entendía porque ahora quería mucho más la atención de él, y no solo se iba a conformar con solo mimos, deseaba algo más. No sabía si estaba bien o no así que decidió ir a pedirle un consejo a alguien con experiencia, su madre.

Le aviso a Yuji que iría a su aldea por unos cuantos días, el solo le pidió que se cuidara. Akane se fue con Ryuu.

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Yuji fue a la oficina de Suguru para hablar sobre Akane, el pelinegro también estaba preocupado por su estado.

Yuji:-No se exactamente porque el idiota de mi hermano se distancio de Akane, pero ella no tiene la culpa.-

Suguru:-Entiendo, tampoco Sukuna-sama me comento nada, pero sé que debe ponerle más atención a Akane-sama-

Yuji:-Exacto, aunque se ha portado algo rara- dijo pensativo.