Capítulo 4

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CAPÍTULO CUATRO

Caminar a clase era algo complicado para Naruto. Parece que la gente había oído hablar de su discurso a sus alumnos y los resultados fueron mixtos. La mayoría de los que asumió que eran padres, o personas de la edad de los padres de sus alumnos, lo miraron mal. Las personas mayores y los ninjas de rango lo miraron agradecidos. Aparentemente, ser espontáneo y descarado era un arma de doble filo cuando se trataba de enseñar. Al menos no lo odiaron directamente.

Caminar pacíficamente fue otra experiencia nueva para él. De hecho, la mayoría lo saludó o le hizo un gesto cortés con la cabeza. Tener al Kazekage como amigo aparentemente fue un buen beneficio. Pensó en la noche anterior y en Temari. Ella le había sonreído más de lo que solía hacerlo y había destruido su postre con pasión, incluso gruñendo a Gaara cuando trató de tomar el último trozo. Naruto sonrió a su pesar. No todos los días veías a Gaara sobresaltado de esa manera.


Entró a la escuela y saludó a todos los que conoció con una sonrisa. Uno de sus compañeros profesores se acercó a él y le tendió la mano.

"Hola. Soy Urameshi Kari. Mi clase es la que está por debajo de la tuya. Tengo que decir que tu pequeña ... demostración ... ayer fue bastante impactante".

"¿Eso es bueno o malo, Urameshi-san?"

"Kari, por favor, y eso es algo bueno. Es bueno tener un maestro al que los estudiantes realmente admiran y no le faltan el respeto".

"¿Admirar? Je, si me admiran, todavía no me conocen. Mis estudiantes me odiarán cuando termine con ellos".

"¿Porque eso?"

"Debido al régimen al que voy a someterlos. Siento interrumpir nuestra conversación, Kari-san, pero tengo que llegar a clase y tú también. Espero volver a hablar contigo".

Kari lo observó mientras caminaba por el pasillo, los tacones de sus zapatos golpeando contra el piso de madera.

'Tipo interesante'.

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Naruto entró en su salón de clases y volvió a ocupar su puesto en el escritorio. Se sorprendió gratamente al ver que todos sus estudiantes habían regresado. De hecho, eran un grupo sorprendente; esperaba que al menos cuatro o cinco no regresaran. Les sonrió y caminó hacia el pizarrón negro.

"Buenos dias clase."

Al unísono, todos corearon "Buenos días Naruto-sensei". Su sonrisa se ensanchó un poco más. Naruto-sensei. Sí, le gustó el sonido de eso. Volvió a mirarlos y se puso las manos a la espalda.

"¿Ahora recuerdan todos de lo que les hablé ayer? Bien, bien. Hoy será nuestro primer día oficial de entrenamiento. Estaré con todos ustedes y haré una evaluación de sus habilidades. Pero primero, salgamos todos. Sígueme."

Al abrir la puerta, se volvió para verlos todavía en sus asientos y arqueó una ceja con molestia.

"¡Mueva sus culos perezosos y salga afuera!"

Todos chillaron y volaron a su lado. Riéndose para sí mismo, los siguió y los encontró en una línea, de cara al edificio.

"Ah, excelente forma. Me alegra que todos sepan cómo mantenerse firmes. Ahora, para comenzar, darán cinco vueltas alrededor de Suna. Una vez que hayan terminado, comenzaremos con algunas calistenia y luego se sentarán mientras yo doy una conferencia sobre un tema. Una vez que haya terminado, y será breve, ya que odio quedarme quieto, comenzaremos a trabajar con cada uno de ustedes individualmente. Este será nuestro régimen para las mañanas. Ahora vámonos. Sígueme ".

Un Uzumaki Entre Las DunasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora