Capítulo 27

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Recuerde (Walking in the Sand) de Aerosmith.

Capítulo veintisiete

Auge. Auge. Auge. Auge.

Kakashi miró por encima del hombro a los árboles gigantes detrás de él, desconcertado por los incesantes golpes que venían de adentro. Solo podía imaginar lo que había allí que podría hacer ese tipo de alboroto profano y esperaba que no tuviera nada que ver con Naruto. Recientemente había vuelto a estar en la buena disposición de su antiguo alumno ... no necesitaba que muriera sobre él todavía.

Una mano pasó como un cohete por su cara, casi sin errarlo, y golpeó la corteza con fuerza, enviando una lluvia de astillas en dirección al Copy Ninja. Saltó a un lado y corrió en busca de una mejor cobertura para esperar su oportunidad de atacar. Gai y Lee se enfrentaron de nuevo al cuerpo de Pein, distrayéndolo de enviar más misiles hacia él.

Curioso en cuanto a cuál era el verdadero propósito de la construcción, Kakashi se arrastró hacia atrás y miró donde el Pein lo había golpeado. Una pequeña grieta en la estructura sangraba agua ... y la grieta se hacía más grande cada segundo.

Bueno ... tendría que averiguarlo más tarde. Sin embargo, la parte de 'gato' de su apodo lo estaba matando en ese momento. Y sabes lo que dicen sobre los gatos y la curiosidad ...

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"¡Quédate quieto, pequeño bastardo!"

Naruto apretó los dientes con frustración mientras corría de lado en los árboles que había creado, un tiburón de agua golpeando la pared justo detrás de él cada pocos metros. Kisame estaba mostrando por qué era un usuario destacado de Suiton, creando tiburones sin esfuerzo a pesar de su condición debilitada.

Kisame no había salido del agua durante varios minutos mientras intentaba ensartar a Naruto con picos de agua, desgarrar su carne con tiburones de agua o desgarrar su carne con un rápido golpe de Samehada cuando el rubio se aventuró demasiado en el agua. El rubio ni siquiera pudo tomar un momento para concentrarse para poder probar su plan... y Kisame lo sabía. Su cabeza solo estuvo por encima del agua el tiempo suficiente para burlarse de su oponente antes de sumergirse nuevamente.

Sin embargo, Naruto estaba notando algo que esperaba que Kisame no estuviera. Mientras corría alrededor del cilindro, notó que el nivel del agua bajaba a un ritmo lento pero constante. Esto solo podría significar que algo había perforado la pared exterior en algún momento, lo que significa que había una pelea cerca de ellos. Encarcelarlo a él y a su oponente repentinamente no era una idea tan candente, ya que no podía ver ni ayudar a sus camaradas afuera.

Sus manos volaron juntas en el sello de Kage Bunshin y cuatro de ellas cobraron existencia, ya corriendo junto con su creador. Necesitaba sacar a Kisame del agua y rápido. Los cuatro se despegaron y corrieron a través del agua, deteniéndose a intervalos regulares cerca del borde.

Kisame asomó la cabeza fuera del agua lo suficientemente alto como para que su nariz saliera a la superficie y respiró. Las branquias a los lados de su cabeza le proporcionaron un poco de oxígeno debajo de la superficie, pero aún era humano y tuvo que salir a tomar aire. Había notado los cuatro clones mientras corrían por la superficie del agua. ¿Cómo podría no hacerlo? Las ondas que enviaron a través del líquido reverberaron a través de él. No necesitaba saber qué estaba planeando su idiota enemigo; solo sabía que tenía que detenerlo.

El rasengan que estaban formando no ayudaba en nada a su disposición y se dirigió hacia uno, enviando tiburones de agua para los otros tres. Los tiburones dieron en el blanco y él destrozó al sorprendido clon con Samehada, dejando que su espada se comiera el chakra con avidez, antes de darse la vuelta para buscar a Naruto.

Un Uzumaki Entre Las DunasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora