Mo Xuan Yu

Capítulo 11

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Desde el primer día de estancia en Villa Mo, Mo Xuan Yu no fue tratado como un igual sino que al contrario, era tratado peor que a un simple sirviente.

El primer trabajo fue deshierbar el jardín, sin siquiera una hoz, lo que le causó varias cortadas en las manos, luego tuvo que lavar a mano el sin fin de ropas de los sirvientes, acabando casi al anochecer. ¿Está si era su familia? ¿Por qué ahora estaba trabajando con los sirvientes?

Su tía, cada que llegaba a toparse con Xuan Yu, solo murmuraba –Una decepción para toda la familia– Repetía constantemente, acompañado de –Por fortuna mi querido A-Yuan podrá ir a Gusu muy pronto– Aunque aquello era una gran mentira.

Mo Yan pudo notar mientras barría las hojas del patio, que su primo tenía nula capacidad para cultivar, siquiera podía sostener una espada de una forma decente y era Mo Xuan Yu, el peor espadachín de Lanling, quien daba esa opinión.

El joven regordete y poco agraciado era años menor que Xuan Yu, pero lucía mucho mayor, además de ser más alto que su primo. Intentaba hacer una conexión con la fina arma que seguramente sus padres habían comprado para él, pero sin un núcleo dorado, está jamás respondería, cayendo innumerables veces al suelo en un ruido seco, Mo Yan solo reía muy bajo, mientras seguía con su tarea.

–¡Hey! ¡¿De quién crees que te estás burlando?!– Gritó el sirviente principal del joven amo Mo. –Amo Mo Zi Yuan, este mocoso se atreve a reírse de ti.

Mo Zi Yuan dejó la espada en el suelo y volvió a ver con bastante enfado a Xuan Yu –Maldito manga cortada ¡¿Que vas a saber tú de cultivación?!

Xuan Yu continuó barriendo, pero pudo quedarse callado –Creo saber más que tú, quiero decir, mi núcleo dorado es débil, lo sé, pero por lo menos tengo uno...

–¡Ah! ¡Ya verás!

Esas palabras no fueron más que una sentencia para Mo Xuan Yu, quien se ganó una golpiza de su enorme y gordo primo.

Para la cena, Mo Xuan Yu no recibió más que medio cuenco de arroz aglutinado, después de tanto duro trabajo, y mientras se sanaba los rasguños y moretones, miró hacia el cielo pidiendo al cielo que aquello todo aquello fuera un sueño, un largo y terrible sueño.

Al día siguiente, antes de siquiera empezar sus tareas, pidió amablemente poder hablar con su tía durante el desayuno, tal vez al verlo en tal estado y decir que su primo era abusivo podría beneficiar en algo, pero no, pues quien recibió el regaño al final de todo fue él.

–¿Cómo te atreves a acusar a mi pequeño A-Yuan de tal cosa? Además, aún si lo hubiese hecho, tú eres mayor, no tienes que comportarte tan infantil– Contestó su tía.

–Pero él me golpeó...– Mo Yan suspiro resignado, un niño mimado siempre sería así, por lo que antes de irse prefirió preguntar por algo más. –Señora Mo, ehm... – ¿Estaba bien preguntar? –¿Dónde... err... dónde está mamá? ¿Puedo ir a vivir con ella?

Esa pregunta estalló como una bomba helada en la habitación, Madam Mo solo vio de una forma fulminante a su joven sobrino, como si acaso hubiese dicho una mala palabra en su presencia.

–Tú... Maldito mocoso ¿Que acaso no te basta con la desgracia que ya has traído a nuestro buen nombre? Además de todo quieres recordar la desgracia de mi pequeña hermana.

–¿Desgracia..?– Xuan Yu solo se encogió de hombros, esperando lo peor.

No sabía si Madam Mo sonreía o acaso estaba afligida, su cara se veía extraña –Por culpa de tus tontas acciones, ella no tuvo escapatoria, enfermó y no solo eso, ¡terminó muriendo por tu culpa! ¡Por la vergüenza y humillación que le causaste!