Mi amiga la muerte

Bailando con la Muerte

George llegó a casa para encontrar a Peyton poniendo los platos en la mesa, dejó su maletín y la tomó de la cadera, Peyton se enojó un poco y antes de que él intentase darle un beso en cuello se alejó de él y puso el último plato.

-¿Peyton? Pensé que olvidaríamos lo que pasó- dijo él.

-¿A si? ¿Donde estabas?- Dijo ella, poniendo con rabia los vasos.

George tragó saliva, inventando la mejor excusa imaginaria...Pero no se le ocurría nada.

-Estaba -gruñó- Ayudando con la organización del personal- ajustó su corbata.

-Adivino, ¿Alessandra?

-Bueno, es ella la encargada ¿No?

-¿En verdad quieres olvidarlo? Bien, pero debes dejar de verla.

-Peyton, te guste o no es trabajo.

-¿Oh trabajo? 

-¡Si! ¡Trabajo!- Peyton dio un paso hacia atrás.

-No me levantes la voz, George.

-¡Entonces aprende a callarte la maldita boca!

-¡Dije que no me levantes la voz!- Carrie escuchó los gritos y se asomó por la puerta.

-¡¿Quién eres tú para mandarme?! ¡Lo que haga en el trabajo no te incumbe!

-¡Solo cállate!

-¡Cállate tú!- Luego de gritarle le pegó un puñetazo en la mejilla y ella se sostuvo de la mesa.

Carrie se cubrió los ojos y cerró la puerta, corrió hacia la cama y se recostó en ella llorando, aquella escena le trajo los traumatizantes recuerdos de la brutal pelea anterior. 

La pequeña comenzó a llorar deseosa por que los gritos terminaran y su madre la llamara a comer, pero los minutos iban pasando, un frío inundó la habitación y Damian apareció frente a la cama.

-¡Oye no creerás donde estuve! Un chico se cayó en la rueda de la fortuna y... ¿Oye? ¿Estás bien?

La pequeña levantó su mirada dejando ver su rostro rojo y sus lagrimas corriendo.

-Déjame- murmuró la pequeña.

-¿Carrie?- Damian acercó su mano y le acarició el cabello, tomó su brazo y la haló hacia él, sentado en el suelo; la sentó en sus piernas y la abrazó, la pequeña le devolvió el abrazo y lloró en su hombro, Damian aún no podía creer lo que estaba haciendo, abrazando por primera vez a una pequeña, abrazando por primera vez, si aún no había sentido lo que era una verdadera amistad ahora lo hacía.

Y este apenas es el comienzo.

Cinco años después...

Luego de cinco años, la pequeña Carrie Belle estaba apunto de cumplir sus diez años, pero su infancia no fue la más hermosa o afortunada, la gran mayoría del tiempo George golpeaba a Peyton, y esta, buscaba cualquier excusa para salir del apartamento, incluso inscribió a Carrie en clases de Ballet a los siete años, para poder estar junto a ella en las clases y distraer a la pequeña de lo que ocurría en casa; George aún no terminaba su amorío con Alessandra, pero su situación lo pondría en problemas si se divorciaba, si llegaba a pedirle el divorcio a Peyton, ella al pedir su parte se quedaría con Carrie y lo delataría por violencia doméstica. Peyton tuvo muchas oportunidades de tomar a Carrie e huir del Golden Gate, pero tal era el miedo que le había tomado a George, que comenzó a pensar que si escapaba él la encontraría y la golpearía hasta matarla. En conclusión, ambos estaban atados al otro.