Celos y envidia

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"En un mundo paralelo siempre seremos tú y yo..."

Unos ojos color cafés mirando mirando el vaivén de los autos através de una ventana ligeramente empañados por el choque del frío de la ciudad con el calor de la parte de adentro de un auto.

-. Olivia... Olivia, me estas escuchando?

O.-  Lo siento, que decías?

T.- Te estaba diciendo que te va a encantar el lugar a donde vamos.

O.- Ah sí?

T.- Si, lo elegí pensando en ti porque sabía que te gustaría.- Ella no respondió pero sonrió ante el comentario.- Pasa algo? Hice algo malo?

O.- No, no eres tú solo estoy un poco distraída en cosas del trabajo.

T.- Bueno toma esto como una forma de desconectarte de todo lo demás, te prometí que la pasarías bien y cumpliré mi palabra.

Con un dulce gesto tomo a Olivia de la mano y le regaló una sonrisa, él parecía muy feliz y Olivia por dentro se sentía un poco culpable de darle esperanzas de que entre ellos podía pasar algo más sabiendo que en su corazón ya existía alguien pero ella se había decidido a darle una oportunidad y ya no había vuelta atrás.

Llegaron a un restaurante que desde la entrada parecía muy elegante, romántico y a la vez muy caro Olivia había creído que Trevor exageraba al decir que había elegido el lugar muy cuidadosamente si, estaba equivocada el lugar era hermoso y Olivia no podía dejar de verlo desde que bajaron del auto, mientras que Trevor le entregaba las llaves al Valet parking ella seguía fascinada.

T.- Yo sabía que te iba a gustar.

O.- Y como sabes? Yo nunca dije que me gustaba.

T.- No es necesario lo puedo ver por la forma en la que brillaron tu ojos cuando lo viste.

O.- Tienes un punto a tu...- Olivia no pudo terminar lo que estaba diciendo porque un auto que iba pasando llamo de inmediato su atención y recordó que era el mismo auto que vio afuera de su edificio y eso causó su seriedad.

T.- Que pasa? Conoces ese auto?

O.- No, solo creí que si.

T.- Te parece si entramos?

O.- Si vamos.

Como todo un caballero, le ofreció su brazo como antes para que entraran juntos, al parecer se veían tan bien juntos que el hombre encargado de llevarlos a su mesa creyó que eran marido y mujer haciéndolos pasará por un incomodo pero gracioso momento.

T.- Me disculpó por eso debí aclarar que venía con una amiga al momento de hacer la reservación.

O.- No te preocupes son cosas que pasan.

T.- Si, aunque en el fondo no me molesta la idea de llamarte esposa.

O.- Debo confesar que a mí tampoco me disgusta la idea.

-. Disculpen la demora estamos algo saturados.

T.- No hay ningún problema.

-. Aquí tienen la carta y la botella de vino que el señor pidió. Con su permiso, en unos minutos regreso a tomar su orden.

T.- Muchas gracias.

O.- Como sabías que vino me gusta?

T.- Soy muy observador.

O.- Ujum.

Mientras más pasaban los minutos Olivia más se convencía de que no se había equivocado del todo al aceptar la invitación, él la trataba como una reina y había puesto extremo empeño en ganarse su asombro desde el comienzo hasta el final de la noche cuando ya estaban por llegar a la casa de Olivia, cuando él abrió su puerta, tomo su mano sea ayudarla a salir, Olivia sentía que era mucho para ella pero a la vez se sentía querida y amada.

O.- Gracias de verdad por lo que hiciste por mi estuvo muy hermoso y me divertí bastante.

T.- Eso quiere decir que cambie tu perspectiva hacia mi persona?

O.- Mi perspectiva de ti nunca ha sido mala, el problema es tu profesión.

T.- Y si te dijera que estoy dispuesto a cambiar de profesión, me darías una oportunidad?

O.- de verdad te tomarias todas esas molestias solo para tener más que una amistad conmigo?

T.- Yo soy capaz de todo por ti. Verás Olivia yo me enamoré de ti desde la primera vez que te vi (dijo tomando ambas manos de la castaña sin dejar de mirarla a los ojos) y desde entonces siempre he querido acercarme ser más que tu amigo sin importar las veces que me has alejado de ti siempre guarde una esperanza y ahora tengo el valor de preguntar si tú, Olivia Benson me das la oportunidad de hacerte parte de mi vida y yo poder ser parte de la tuya y la de tu hijo, formar una familia los tres y ser felices juntos.

Para ese instante Olivia tenía los ojos llenos de lágrimas después de escuchar las palabras de Trevor, tenía un nudo en la garganta que no la dejaba pronunciar una sola palabra y solo bajo la mirada al suelo él, quien también estaba conmovido por la escena tomo suavemente a Olivia del rostro obligándola a mirarlo a los ojos de nuevo y sin más depositó un beso en sus labios, tan tierno parecía como si él tuviera miedo de poder dañarla con es beso.

Al final sí lo hizo pero no lo hizo él directamente, solamente habían pasado unos segundos de aquel beso cuando fue interrumpido bruscamente por alguien separando al abogado de Olivia, un tipo alto, clavo y con barba agarro de la camisa al pobre hombre que apenas de daba cuenta de lo que pasaba lo trajo a él y le dijo en tono amenazante.

.- Escucha bien lo que voy a decirte. Si la vuelves a besar, si la vuelves a tocar o si quiera la vuelves a mirar TE MATO.

Olivia estaba paralizada por lo que acababa de escuchar y más por lo que estaba presenciando ante sus ojos que no dijo más que una palabra.

O.- Elliot?

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