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El príncipe salió del salón con pasos nada sigilosos, casi parecía que quería cuartear el piso.

Subió las escaleras hacia su habitación, a la cual solo entró para cambiarse la ropa por una mucho más cómoda y coger una capucha de color oscuro. Se apresuró a salir, pero está vez con cuidado de que nadie notara su presencia, como si de un ladrón que está a punto de robar una caja fuerte del banco de tratase.

Justo unos pasos fuera de la habitación, se encontró a la chica que había llevado a Jungkook hacia el. Tapó su boca para que no dijera nada y la obligó a entrar a la habitación.

- ¿Pero que te pasa Kim? - reclamó cuando pudo decir algo.

- Me voy a ir. Llevo a Jungkook conmigo también, ¿Dónde está?

- Pero no es necesario que te alteres de la forma en que lo estás haciendo ahora - dijo tranquila sobando sus muñecas que aún dolían.

- ¿Acaso no entiendes? -estaba desesperado por salir lo antes posible - A lo que me refiero es a qué quiero escapar de aquí para siempre, quiero irme con Jungkook -explicó ahora susurrando para que nadie afuera lo escuchara.

- ¿Qué vas a hacer qué? ¿Acaso te volviste loco? El Rey Kim se endurecerá cuando descubra que no estás. ¿Y sabes con quien se va a desquitar? - hizo una pausa - Exacto, conmigo que soy cercana a ti y luego irá con mi padre.

- Por favor, te lo estoy implorando. Tienes a un príncipe rogándote que lo ayudes. Mi padre me quiere casar con una princesa y no quiere que esté con Jungkook. Juro que en el futuro te compensaré a ti y a Namjoon todo lo que hacen por mi, lo prometo.

- Ash! -se quejó - Está bien, Jungkook está en el cuarto de espadas.

- Gracias -dijo con unas sonrisa y se fue a pasos rápidos pero a la vez sigilosos hasta donde le había dicho que estaba.

Tomó al chico de la mano y puso un dedo delante de su boca para indicar que no podían hacer ruido, lo llevó a la parte trasera donde estaban los caballos.

- Tae, ¿A dónde vamos? -preguntó
cuando el rubio lo subió a un caballo blanco.

- A ver el atardecer juntos - si el decía la verdad seguro que pensaría que estaba loco por renunciar a toda su vida como príncipe, además de que el era quien heredaría todo el poder que tenía su padre.

Cuando pasaron por mucho el pueblo, Jungkook se empezó a preocupar de toda esa situación.

- Taehyung, dime a dónde vamos en realidad. Estás demasiado nervioso, ¿Lo sabes?

- Quiero llevarte a un lugar que conozco, eso es todo - contestó con una sonrisa dejando al castaño no muy convencido con su respuesta.

Avanzaron más y más, casi llegando al páramo, fue cuando ya había anochecido, ya había anochecido y todavía no llegaban al supuesto lugar.

- Tae, hay que detenernos -dijo suave el castaño esperando que este le hiciera caso, pero no fue así -Lo estoy diciendo en serio. Ya tenemos que regresar, tu padre se enojará si descubre que saliste sin su permiso.

- Tranquilo, tenemos toda la noche -no se detuvo en ningún momento.

-Dime la verdad, ¿A dónde vamos? -se detuvo repentinamente -No pienso avanzar ni un metro hasta que me digas a dónde quieres ir.

-Bueno -dió un suspiro pesado -Nos vamos, lejos, donde mi padre no sepa que estamos. Quiero irme y nunca volver.

- ¿Pero qué dices? Si tuviste una pelea con tu padre estoy seguro de que lo pueden solucionar, tu eres el futuro rey, no puedes irte.

- ¿Por qué no? Para mí padre solo soy un inútil, no quiero ser rey.

- ¿Y qué hay de mi entonces? Tengo a mi familia, no puedo dejar a mi madre, a mi hermana y mucho menos voy a dejar que mi abuela se preocupe por mi.

- Jungkook, yo... No lo entiendes... Yo solo... Ash! -no sabía cómo decirle aquello, tampoco sabía si sería de utilidad decirle que su padre quería que contrajera matrimonio con otra persona.

- Regresemos, todo estará bien -hizo que el caballo diera unos paso hacía el, lo suficiente como para poder tocar su rostro y acariciar sus mejillas -Tu pronto serás rey, no puedes huir de eso, yo tengo una familia, mi abuela ya es bastante mayor y si me voy solo tendrán a mi hermana, no puedo irme tampoco. En unos años, si todo va bien, te convertirás en rey y yo me casaré contigo.

- Jungkook pero yo... -el contrario puso en dedo sobre sus labios para callarlo, luego lo retiró y le dió un beso suave - Si así lo quieres, entonces podemos regresar.

- Gracias. Cuando regresemos te tengo una sorpresa, pensaba ir a tu cuarto de todos modos, pero interrumpiste mis planes.

- ¿Qué sorpresa?

- Lo verás cuando lleguemos, si te digo ahora entonces ya no será sorpresa -dijo con una sonrisa inocente que el rubio no supo cómo decifrar.






















No se supone que iba a actualizar ayer? Si, se supone que si, pero hubo problemas.

¿Cuál creen que sea la sorpresa de Jungkook?

Conquistando al príncipe Kim² - versátilDonde viven las historias. Descúbrelo ahora