Día #2

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En esta ocasión el día no estaba de buen humor; el cielo se encontraba cubierto por una enorme y espesa capa de nubes grises, además, hacía tanto frío que parecía que Jiang Cheng moriría ese mismo instante de hipotermia. Aún así esto no fue un obstáculo para levantarse temprano y alcanzar a su hermana en la cocina para juntos preparar un buen desayuno.

La verdadera batalla para Jiang Cheng empezaría al momento de despertar a Wei Wuxian del mundo de los sueños; sin embargo, nada preparó al oji azul para encontrar a su hermano ya despierto, cambiado y con una gran sonrisa en el rostro.

—Quién eres tú y qué hiciste con mi hermano. Exijo un respuesta—. Demandó el menor y adquirió una pose defensiva.

Todos sabían del sueño tan pesado y profundo que tenía su hermano mayor. A veces ni hechándole agua directo en la cara lograban despertarle.

"Es el fin del mundo, no hay otra solución. Iré a preparar mi testamento" pensó Jiang Cheng.

—Primero que nada, buenos días. Segundo, me llamaron del conservatorio para hacer unos cambios urgententes en la presentación de esta noche—. Explicó rapidamente Wei Ying mientras se dirigían al comedor donde la comida ya estaba lista y Yanli les esperaba con una gran sonrisa.

—Entiendo, entonces asumo que me quedaré con Shijie y el pavo real—. Aseveró Jiang Cheng al comprender la situación.

—Noup, irás conmigo al conservatorio por lo que después de comer necesito que vayas por el ukelele. Hoy practicaremos algo de canto apenas acabe esos arreglos, mientras tanto tu seguirás practicando con el instrumento—. Aclaró Wei Ying.

—Lo siento A-Cheng, me encantaría acompañarlos pero tengo una cita médica que había pasado por alto, A-Xuan irá conmigo—. Respondió rápidamente la mayor al ver la cara de preocupación de sus hermanos.

Intercambiaron algunas palabras más entre todos y quedaron con que se verían en la noche. Ambos hermanos almorzarían fuera en lo que Wei Ying terminaba sus asuntos.

Sin nada más que decir el dúo se dirigió al trabajo del recién mencionado, quien al llegar le mostró con indicaciones precisas la siguiente parte que debía practicar.

Estuvo con Jiang Cheng unos momentos más escuchándole y haciéndole unas cuantas correcciones antes de salir a realizar lo encomendado.

Una vez solo en la habitación Cheng siguió practicando al pie de la letra lo indicado, pero cuando sintió su mano amortiguada decidió tomar un descanso y en su lugar poner en práctica su voz.

Empezó a cantar.

Ha pasado tanto tiempo
Finalmente descubrí tus besos
Me enredaste en tu mirada
Me abrazaste con todos mis defectos

Tú si sabes quererme
Tú si sabes adorarme
Mi amor, no te vayas
Quédate por siempre, para siempre
Para siempre amarte


En este punto se detuvo y pensó en la palabra "adorar ". Al inicio y hace muchos años atrás esta palabra se le hacía realmente curiosa, pero aún así, no era totalmente ajena a la misma. Él veía esa palabra reflejada en la mirada que Lan Wangji le dirigía a su hermano y viceversa.

Un día Wei Ying captó esa mirada de incomprensión que les dirigía a ellos dos, y como un entendimiento implícito le dijo "Jiang Cheng, nunca te conformes con nada menos. Siempre espera una mirada como esa de la persona que ames. Tú más que nadie mereces una mirada así".

En un principio el Jiang no comprendió las palabras de su hermano, pero quién le diría que un tiempo después llegaría a entender aquella frase; y más que entender la frase, fue que aprendió el significado de "adorar".

Tú si sabes querermeDonde viven las historias. Descúbrelo ahora