"No soy un tipo malo
así que no me trates mal si me siento triste, ¿De acuerdo?
por favor no te enojes si no te sonrió de vuelta, ¿De acuerdo?
si yo arruino mis palabras, no pienses que soy absurdo, ¿De acuerdo?
¿De acuerdo?"
| Detenti...
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No pueden quedarse para siempre en ese espacio libre aunque lo deseen. Unos se van primero porque tienen hambre, no es sorpresa que Seokjin se haya ganado la confianza de Jungkook, así que este es el primero en aceptar seguirle a hurtadillas por el campamento hasta llegar a la cabaña en la que se hospeda y en la que asegura tiene en su maleta mucha comida deliciosa para compartir. Al plan se les suma Namjoon.
Taehyung y Jimin han estado hablando de clases y planes que hacer cuando regresen, siendo interrumpidos con la invitación y un rugido del estómago de Taehyung. Deciden no ir para no entorpecer la "expedición", sin embargo cuando Yoongi avisa que irá a la máquina expendedora para traer de tomar, es Jimin quien accede a acompañarle. Se van en dirección contraria dejando a Hoseok y Taehyung conversando, la peli morada todavía presente pero en silencio.
Van de la mano y se detienen cada tanto para asegurarse de no ser vistos, hasta pasan agachados por debajo de unas ventanas en las que se lleva una actividad, el salón sumido en silencio y el único ruido siendo el de sus pisadas y el del gis acabándose en el pizarrón.
Están por llegar a la cabaña del comedor donde se encuentra una máquina pegada al exterior izquierdo cuando del mismo sale una maestra deteniéndose para ponerle seguro a la puerta. Eso les da un margen de tiempo a ellos para esconderse, entrando a un cobertizo cuyas puertas entreabiertas dejaron a nada de cerrarse para tener el espacio en el cual ven a la mujer cerrar el comedor e irse. Lamentablemente va también a las máquinas y se queda ahí de pie con tanta confusión en qué escoger que los muchachos suspiran y se preguntan cuánto tiempo habrá que esperar.
Jimin mira el lugar en el que se encuentran, cálida luz solar se filtra por ventanas altas y pequeñas, alumbrando material de jardinería apilado en la esquina, delante hay un gran costal con balones de voleibol en su interior, hay también un caballo de gimnasia y unas colchonetas apiladas.
El castaño se sobresalta cuando es asaltado y su boca en cubierta con una mano, luego arrastrado hacia la parte oscura del lugar para esconderse detrás del caballo, como es Yoongi no se asusta, pero sí extraña. Todo tiene explicación cuando la puerta se abre y es el profesor Kim quien se asoma, mirando al lugar con detalle antes de bufar cerrar la puerta, poniendo la traba sin el candado. Siguen en silencio, oyendo como se aleja protestando palabras la viento.
En desconfianza continúan en silencio uno al lado del otro, Jimin voltea y mira a Yoongi de perfil, cómo la piel pálida luce la nariz pequeña y labios delgados, así como las pestañas que desea detenerse a contar cada que le ve dormir. Siguen igual, en el suelo, callados, cerca y ocultos.
Está tan agradecido por tanto que ha hecho por él, Jimin se anima y se acerca dándole un beso en la mejilla logrando que este volteé a verlo primero a los ojos, después a la boca que ha acariciado su rostro con cariño. Finalmente regresa a los ojos.
Su voz se escucha más gruesa al susurrarle muy de cerca —Yo... llamaré a Seokjin o a Hoseok para que vengan a destrabar la puerta.
—Espera —Jimin no permite que saque su teléfono, coloca una mano sobre la del mayor y le deja posada ahí, siente su cálido tacto—, espera un momento, por favor.
