Sweet Candy | Uchiha Sasuke |

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"EL AMOR Y LA JUVENTUD"

Ya había pasado una semana de su encuentro con Raito Uzumaki y Yuna estaba recuperándose de sus heridas mientras su hermano continuaba con el negocio.

Algunas tardes la pelirosa salía a saludar a algunos de sus vecinos y atraer a turistas/viajeros qué pasaban por la Aldea.

Su ubicación lo hace mucho más fácil, una rutina de la qué era usual antes de su viaje con Sasuke.

Yuna soltó un enorme suspiro en modo depresión mientras observaba a los clientes en el restaurante.

Siempre que sus pensamientos regresaban a Sasuke solo podía pensar en lo fácil que había aceptado su "ruptura"

¿Sí quiera estaban en una relación formal?

Yuna sacudió esos pensamientos de su cabeza, ni siquiera quiere saber la respuesta, solo esta pasando por un mal día.

Solo soy muy buena actriz, se justificó en su mente.

¡Si! Soy muy buena actuando...

Pero no hay forma qué se encuentre a Sasuke de nuevo, estaba el hecho que si venia a la Aldea Oculta de las flores no sería por ella ¿o si? Además lo más común es evitar a tu ex.

Ella casi nunca salía de la Aldea, así que un encuentro entre los dos es casi imposible, Yuna volvió a suspirar decepcionada de su propia vida amorosa.

—Sí sigues con esos suspiros vas a ahuyentar a nuestros clientes.—Se quejó Shuu.

—Shuu-san no sea tan duro con su hermana. —Pidió el nuevo empleado Tokito. —Toma Yuna.

El rubio ceniza le dio uno de los bocadillo qué tenían en el mostrador, la pelirrosa lo tomo gustosa.

El chico nuevo le agradaba bastante.

—Gracias Tokito-chan. —La pelirosa sonrió.

—Sí la consientes demasiado se volverá un problema. —Dijo el rubio negando con la cabeza. —La última vez que le di algo gratis nos dejo casi en bancarrota.

Yuna se río con diversión. —No fue tan malo...

—Lo fue.

Tokito se rio también con los hermanos, este trabajo era mucho mejor que el anterior qué tenía, si, es mejor ser mesero en este restaurante qué siendo mercantil.

—¡Como sea! Iré a saludar a Terano-bachan, siempre aprecia mi presencia. —La pelirosa levantó la cabeza orgullosa y sin ver al par de hombres salió del negocio.

—¡¿Y quien va a cubrir tu puesto idiota?! —Exclamó Shuu, pero Yuna ya no estaba para escucharlo.

Su jefe solo negó con la cabeza y le dio una mirada qué lo decía todo.

Ahora fue el turno de Tokito de suspirar, creo que ahora ya no le gustaba tanto su trabajo.

Al menos pagaban las horas extras bien.

🍬🍬🍬

Yuna sonrió a la señora Terano estaba regando las plantas de su jardín cuando llego a visitarla.

La anciana había sido de las primeras en darle una gran bienvenida a los hermanos Fujiwara, algo por lo que estaban muy agradecidos.

—Yuna-chan un pajarito por ahí ha estado diciendo que volviste a salir con un chico apuesto. —Musitó con voz cantarina la anciana después de haberla saludado.