18 | Natasha Romanoff (C-17)

656 51 17
                                    

micaokis DESPUÉS DE AÑOS LUZ AQUÍ ESTÁ TU PEDIDO ESTRELLITAAAA😂✨

Espero lo disfrutes y que lo ames tanto como yo amé escribirlo🤧

Pdta: Mensaje al final🏳️‍🌈
________________________________________

Por el resto de mi vida (continuación).

Natasha y Gema disfrutaban de su aniversario cenando juntas en uno de los restaurantes más lujosos de Nueva York. Aquel había sido un regalo de Tony al que aceptaron encantadas, pues en ese momento aún no se decidían en que hacer.

Las esposas se sujetaban la mano por sobre la mesa mientras conversaban animadamente de cualquier tema que cruzara por sus mentes. Todo esto mientras daban ocasionales tragos a sus copas de vino pero sin apartar esa mirada repleta de amor que sin importar los años se seguían dedicando la una a la otra.

Cinco años y el matrimonio Romanoff-Maximoff seguía tan fuerte como el primer día.

—Pepper se ve preciosa con su embarazo ¿no crees?— preguntó Natasha de pronto.

—Muchísimo, creo que es una de esas mujeres a las que naturalmente les luce la maternidad— Gema dió un mordisco a su pan al ajillo, disfrutando ese delicioso sabor que tanto adoraba. Aunque sinceramente, no pudo concentrarse mucho en el sabor, pues la expresión en el rostro de su amada la distrajo completamente— ¿te pasa algo, cariño, está todo bien?—  la mujer que había vuelto a su color natural de cabello negó con suavidad.

—No, está todo en orden, es solo que...— una pequeña sonrisa se asomó en los labios de Romanoff— siempre pensé en que se sentiría ser madre y en que si yo pudiera serlo no lo dudaría un segundo. Sin embargo, creo que de las dos a ti te luciría mucho más la maternidad ¿no has considerado la idea de... Que tengamos un hijo?— aquello tomó por sorpresa a Gema quien se ahogó con el trozo de pan que había masticado. Soltó la mano de Natasha para darse suaves golpes en el pecho mientras bebía un poco de agua.

—Ser madre...— murmuró la pelinegra, aun tosiendo y tomando un poco más de agua.

—L..lo siento, no pensé que reaccionarías así, es solo un comentario y..

—No, no tienes porque disculparte yo...— Gema no encontraba las palabras correctas para explicar su reacción— es que me tomaste por sorpresa. La idea no me molesta o me desagrada en lo absoluto, es solo que...— Gema volvió a sujetar la mano de Natasha— nunca lo habías mencionado. Llevamos cinco años casadas y en ningún momento discutiste sobre esto conmigo ¿por qué soltar el comentario de esta forma?

—Es que nunca has hablado sobre ello, nunca he sabido tu opinión al respecto. Jamás me comentaste tu idea sobre los niños, si alguna vez quisiste tenerlos, que clase de vida te imaginabas para nosotras cuando envejezcamos, yo solo...— Natasha suspiró tomando un poco de vino y apartando su mirada de Gema. A la pelinegra le pareció extremadamente tierno el pequeño sonrojo que adornó las mejillas de la pelirroja— olvídalo, fue una estupidez.

—No seas tonta, Natty— soltó Gema en una pequeña risa— yo pensé que eras tu la que no quería hablar de esto. Como hemos estado cómodas estos años pues nos metimos en asuntos... Complicados que nos eran más fáciles de manejar siendo solo nosotras dos— una pequeña sonrisa adornó el rostro de Romanoff. Sin duda los últimos años habían sido una total locura— pero teniendo en cuenta nuestra relativa calma de estos meses, no estaría mal considerarlo.

—¿¡Enserio!?— los ojos de la rusa brillaron por la emoción. La sokoviana sentía como su corazón se aceleraba ante la hermosa imagen del amor de su vida expresando tal felicidad.

One shots | Marvel (Vol. II)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora