Te probaste diferentes atuendos en el lujoso vestidor, tu novio te esperaba con una copa de champán en el sofá de afuera.
Sacaste un par de delicada lencería rosa de la percha, averiguando cómo ponértela correctamente. Estaba hermosamente adornado con pequeñas flores de encaje y pétalos. La tela brillaba bajo las luces fluorescentes y se ajustaba perfectamente a tu piel.
"¿Princesa?" preguntó Jin mientras entraba al camerino. Gritaste, cubriéndote el cuerpo ya que al principio no sabías quién era.
"Princesa, no has salido en un tiempo, me preocupé-" comenzó Jin, pero al verte, se congeló, sus labios se abrieron suavemente. Quitó tus manos de tu cuerpo, asimilándolo todo.
"¿Qué opinas?" sonríes inocentemente ante su reacción, pero tus ojos estaban lejos de ser inocentes. Sus manos se encontraron con tus caderas, empujándote contra la pared mientras sus labios chocaban contra los tuyos. Sonreiste en el beso, envolviendo tus brazos alrededor de sus hombros.
"No nos iremos hasta que te haga mía", dijo tu novio oscuramente contra la delicada piel de tu cuello mientras sus manos vagaban por tu cuerpo.
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NAMJOON
"Está bien, estoy lista", anunciaste, pasando una mano por tu peinado. Tu novio se levantó del sofá, sus ojos en el teléfono antes de levantar la mirada, deteniéndose en seco. Te miró de arriba abajo, observando cada parte de tu cuerpo. Llevabas un ceñido vestido de satén con tirantes finos que llegaba hasta la mitad de los muslos.
Namjoon frunció el ceño profundamente, olvidándose del zumbido del teléfono en sus manos. La punta de su lengua asomó el interior de su mejilla; sabías que estaba enojado por algo.
Estabas a punto de preguntar, interrumpió y arregló la correa de tu vestido que se deslizó por tu hombro, alejando tus palabras no dichas. Su perfume golpeó tu nariz por la pura cercanía mientras te miraba de arriba abajo una vez más. Te ruborizaste bajo su despiadada mirada, agarrándote a tu elegante bolso y supiste que era mejor que te portaras bien.
"Está bien, vámonos", dijo tu novio sombríamente, llevándote con la palma de la mano en la parte baja de la espalda.
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