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S E O K J I N
Lo acompañaste a cenar con algunos de sus hermanos de su pandilla. Al principio, no estaba muy seguro de eso, pero seguías insistiendo, queriendo sentirte más cerca de él, conociendo a las personas más cercanas a él. Dudaba de la idea de que estuvieras en una habitación llena de hombres, pero confiaba en que no pasaría nada. Aunque después de la cena, llamaste la atención de alguien a quien consideraba más cercano a él que a nadie más de todos ellos. Sintió una punzada de ira en la boca del estómago cuando sintió la sensación de traición invadirlo. Observó con una mirada gélida, mientras tú te volteaste para sonreírle un par de veces, mientras te llamaba aquí y allá, para tratar de entablar una conversación contigo. Esas sonrisas, le pertenecían. ¿Por qué irías y le darías eso a otra persona?
No te habías dado cuenta, pero todos los demás lo hicieron y la habitación se volvió inquietantemente silenciosa. El hombre con el que estabas hablando se calló, al igual que tú. Luego te volteaste para mirar a Jin, quien estaba sentado con una mirada de dolor en su rostro.
"Oh, por favor, no te detengas en mi cuenta". Dijo de una manera severa que te hizo fruncir ligeramente el ceño.
"Lo siento bebé ..." Suspiró en voz baja, luego se aclaró la garganta. "¿Puedes ir a esperarme afuera en el auto? Creo que es hora de que te lleve a casa ahora ".
Te levantaste sin dudarlo y te dirigiste a su coche.
Después de que estuvieras fuera del alcance del oído, se levantó lentamente y arrojó rápidamente cualquier cosa de la mesa que estaba a su alcance antes de agarrar al hombre por el cuello y sacarlo de su propio asiento.
"¡¿Qué diablos crees que estabas haciendo ahí ?! No la traje para que pudieras enamorarte, ¡se suponía que eras mi hermano! Le gritó mientras lo sacudía de un lado a otro. "TN es mía, y solo mía, ¿entiendes? ¿Entienden todos eso?
N A M J O O N
Su ira y sus celos eran sutiles cuando se lo proponía. Nunca le gustó mostrar demasiado ese lado de él, pero cada vez que tenía que hacerlo, salía y era como si fuera una persona diferente.
Por lo general, era sensato sobre estas cosas y lo mantenía bajo control, pero no podía hacerlo cuando se trataba de tu fiesta de cumpleaños. Tus amigos pensaron que sería muy divertido, si tienes animadores, como una sorpresa. Pero si no lo sabías, Namjoon tampoco, porque sabían que él no lo aprobaría, especialmente porque la fiesta se llevaría a cabo en uno de sus clubes de su propiedad. Sabían lo serio que era cuando se trataba de que estuvieras cerca de otros hombres, pero lo que no sabían eran sus tendencias posesivas.
Decidieron hacerlo de todos modos, poniendo los ojos en blanco ante la idea de que Namjoon se enojara. Después de todo, este era tu día, y solo querían que te soltaras y la pases bien. Pero en el momento en que esos bailarines salieron y se acercaron a ti, levantándote de la silla para llevarte al centro de la habitación, espetó.
