Siempre fuiste tú

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Andrea Pov

No sé cuantas horas habían pasado, pero un maldito dolor de cabeza me acribillaba, no vuelvo a tomar.
Como pude me levanté y me dirigí a la cocina, necesitaba agua, moría de sed.

-Demonios, nunca sentí tan deliciosa el agua como ahora.

Volví a tomar otro vaso de agua, sentía que no podía saciarme, busque en los anaqueles algún medicamento que me ayudara con el dolor de cabeza, pero no tuve suerte.

Tan descuidada como siempre pensé, volví a mi habitación, tal vez con un baño aminoraba el intenso dolor, entré a la regadera y mi cuerpo se tensó al sentir el frío del agua, esto debía ayudarme al malestar, terminé de bañarme, me coloqué mi albornoz y salí dirigiéndome a la sala.

Mi estómago me reclamaba comida, no sabía cuantas horas llevaba sin comer, antes de llamar vi asomarse a Marcela por la puerta, un ligero recuerdo vino a mi cabeza... Daniela, Marcela y yo? No, no tiene sentido.

-Hola-Habló cuando terminó de cerrar la puerta -¿cómo te sientes?-preguntó.

-Me he sentido mucho mejor en otras ocasiones.

-Tomar tan temprano no debe ser tan bueno-recriminó-te traje pastillas para el dolor, un poco de comida y café.

Quedé sin palabras, no la merecía, ella es muy dulce conmigo.

-Eres genial, busqué pastillas y no encontré -confesé.

-Sí, las que tenía ya estaban caducadas, hay que volver a llenar el botiquín -mencionó.

Se fue hasta la cocina trayendo con ella un vaso de agua. Una parte de mi se sentía extraña no estaba acostumbrada a esto, así se sentirá tener una persona que se preocupa por ti...una pareja.

Agradecí cuando extendió el vaso.

-Por cierto, Daniela te mandó saludos y que esperaba estuvieras bien-Daniela, ¿cómo sabía de ella?

-¿Daniela? De dónde la conoces -no podía quedarme con la intriga.

-Hoy nos conocimos, ella te trajo hasta aquí, después se fue conmigo a la cafetería y estuvimos platicando-se me revolvió el estómago, "platicando" conocía a Daniela.

-Ella no te conviene -hablé sin pensar.

-¿Disculpa?-mencionó.

-La conozco, y ella no es una persona estable, ella te puede hacer daño.

-No sé de que hablas, a mi me pareció una mujer atractiva, respetuosa, carismática-maldita sea, se quedaba sin calificativos hablando de ella.

-Puede que sea todo eso pero no te conviene, Marcela tú eres dulce, una mujer tranquila y ella es como un remolino que podría destruirte emocionalmente- no quería que pase por lo que pasó Alejandra, ella no.

-Creo que exageras, y pensé que eran amigas-exclamó.

-Y lo somos pero, eso no quita que sea sincera contigo, yo solo busco tu bienestar- tomé su mano, como extrañaba la calidez de su piel. Nos miramos por unos instantes hasta que ella se separó.

-No discutiré eso contigo, a mi me pareció encantadora. El sábado saldré con ella en plan de amigas-comentó. Giré mi cabeza provocando un dolor agudo en la cien.

-¡No puedes ir!-advertí.

La escuché reír.

-No pedí tu permiso, estoy muy grandecita para eso y tú no eres mi madre-contestó. Maldición, pero por qué ella.

-Disculpame, tienes razón-no hablé más. Tomé las cosas que me trajo. El café lo sentí asqueroso y no era el, mi estómago estaba revuelto y peor con aquella noticia. Amigas, amigas, no conozco ninguna amiga de Daniela que no haya pasado por su cama.

Volví a mi habitación, no tenía ánimos de nada. Escuché timbrar mi celular y tomé la llamada sin verificar de quien se trataba.

-Hola-respondí.

-Hey, mujer cómo sigues de esa cruda- lo que me faltaba la dichosa amiga de la pelirroja.

-Mejor, gracias por traerme a casa.

-Nada que agradecer, al contrario, yo debería agradecer-habló entusiasmada.

-Por qué harías eso-Indagué.

-Gracias a ti conocí a una mujer ¡hermosa!-exclamó, tense mis labios.

No quería hablar sobre aquello, pero ella continuó hablando.

-La invité a salir y aceptó, me podrías ayudar en cuáles son sus gustos, o si sabes cosas de ella que necesite saber-pidió.

-Alejate de ella, Daniela. Marcela no se convertirá en uno de tus jueguitos, ella se merece a alguien diferente a nosotras-expliqué.

-Que hay de malo conmigo o con nosotras, a qué te refieres.

-Somos inestables, hemos hecho cosas desagradables, y Marcela es todo lo opuesto, no podemos lastimarla.

No somos buenas opciones para ella, no para la pelirroja.

-Una mierda lo que dices, somos buenas para cualquier persona, lo pasado pasado es, no hay nada malo con nosotras mujer. Andrea, por dios qué te pasó en estos años.

Qué podría decirle, ella no entendería, estamos dañadas yo desde mi infancia a causa de mi padre, ella desde que conoció aquella tipa en la universidad.
Aunque lo he intentado superar hay momentos en que la oscuridad vuelve apoderarse de mi mente, y manda todo al carajo y pasa con ella también, es por eso que no puede mantener una relación estable.

-Andrea, estas ahí, mira no sé bien si esto me dices porque sientes celos, si ella te gusta dímelo y yo me alejo de ella-aclaró.

-Joder, que no escuchas que no somos buenas para ella-me exalté.

-Deberías ir a terapia es el mejor consejo que te puedo dar como amiga, en serio, no está bien como piensas, y perdoname pero no me voy a alejar de Marcela me cae bien-no seguí escuchando y colgué la llamada.

Mierda mierda.

Por qué tuvo que regresar, por qué tuvo que conocer a la pelirroja, esto no terminaría bien.

-¿Te pasó algo?-escuché una voz y la vi asomarse por la puerta, seguro escuchó mi voz exaltada.

-Nada, asuntos de negocios que me alteran un poco -mentí-Marcela, disculpame por mi comportamiento, tienes razón no debí reaccionar así, yo solo solo...-me quedé sin palabras, qué le diría: estaba celosa, tal vez un poco debo admitirlo pero, más es preocupación a que salga lastimada.

-No te preocupes ya había olvidado aquel incidente, en sí agradezco que te preocupes me haces sentir que te importo.

-No sabes cuanto, yo yo...-¡maldición! las putas palabras no querían salir.

-Debo ir al baño-terminé de hablar. Ella asintió y salió de mi habitación.

Genial, estar con ella me pone muy idiota. Tomé la almohada y la puse sobre mi cara.

¿Qué me haces Marcela?

A que no se lo esperaban😏

Quién quiere darle amor a Andrea 🥺 lo necesita

Alguna vez se han sentido cómo ella?
Creen que debe buscar ayuda profesional

En mi país se celebra el día de los difuntos, así que feliz día de los muertos.

Nos vemos pronto... dentro de unos años tal vez. Espero me ayuden con un voto o comentario.
¡Gracias!