Alicia es una chica española que vive en Londres con su Madre y su hermano tras el fallecimiento de su padre. Un día le llega la oportunidad para cumplir su sueño, ser modelo, y ella, con miedo por dejar a su madre sola después de tantos años, pero...
- Buenos días - dije despertando a Vera - despierta que hoy te tienes que venir conmigo - dije quitándole la manta de encima. Hoy tenía una sesión de fotos y le ofrecí a Vera venir a ver como iba la sesión y luego nos iríamos a comer por ahí. Me fui a duchar una vez Vera ya se había levantado. Después me vestí
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Después de ponerme las zapatillas y las joyas fui a preparar el desayuno
- Bonjourrrrrrrr - dijo canturreando Vera
- Buenos días, que contenta estás hoy no???- dije riendo
- Si, no se, hoy me he levantado de buen humor
- eso está bien - dije mientras le ofrecía una taza de café. Ella la aceptó cogiendola y bebiendo un trago
-mmmmmm, de vainilla
- Si, nuestro favorito - dije dándole un sorbo a mi café. Después de un rato terminamos de desayunar y cogimos el coche para ir a la sesión.
-🎶Fala pro teu pai que eu não quero dinheiro. Eu já tenho a riqueza que é você. Se quiser casar, eu caso. Vamos brincar de amar, somente eu e você🎶 - cantamos Vera y yo mientras "Sou Favela" sonaba a tope en el coche.
Después de una media hora llegamos al sitio y entramos.
La mañana se nos pasó volando. Le ofrecieron a Vera salir en alguna que otra foto conmigo y aunq ella no era modelo aceptó y acabaron maquillándonos y sacándonos fotos a las dos juntas. Después nos fuimos a por algo de comer en un break y volvimos al set para terminar de hacer mis fotos para la revista.
- Dios que hambre tengo - dijo Vera mientras subía al asiento de copiloto
- Yo también, vamos a comer a un restaurante?
- Siiii - dijo, celebrando como una niña pequeña - por cierto, te importaría que invitara a Kylian? - Le miré con cara extrañada - Y a Neymar claro - yo reí y simplemente asentí.
Nos dirigimos al restaurante y una vez allí entramos directamente para que no mucha gente nos reconociera y se armara la de Dios. Poco tiempo después llegaron Kylian y Neymar.
- Salut- dijeron a la vez . Nosotras les saludamos con dos besos. Neymar se puso a mi lado y Kylian al lado de Vera que estaba en frente de mí.
- Qué tal la sesión? - preguntó Neymar
- Muy muy bien - dijo Vera - Nunca pensé que me lo pasaría también haciéndome fotos
- La verdad es que se le da muy bien - dije sonriendo
- Se nota - dijo Kylian. Vera se puso roja y yo me reí junto a Neymar al ver la situación. Estuvimos hablando un buen rato hasta que nos trajeron la comida y Kylian y Vera se pusieron a charlar sobre un artista que les gustaba a los dos. Así que aproveche para preguntarle a Neymar qué tal iba todo con Davi y Carol, con su familia en general.
- Davi está muy bien, gracias por preguntar, de hecho, está deseando verte y volver a jugar contigo al fútbol, le encantó, aunque no sé porqué, juzgabas fatal - dijo bromeando, yo le lancé una mirada asesina y luego reí- Parece que te tendrás que venir conmigo a Brasil algún día y así también os veis Carol y tu, le caíste muy bien, me dijo que le transmitías muy buenas vibras.- yo sonreí asintiendo
- Sería un verdadero placer visitar la tierra donde naciste y ver cómo está la familia que te ha soportado durante tanto tiempo - Él me dio un golpecito en el hombro - que era broma - dije riendo. Él me observaba sonriendo
- A mi hermana también le gustaría conocerte - comentó después de unos segundos
- Le has hablado de mi?
- Si, y Davi también, le ha hablado de ti a toda mi familia - yo sonreí
- Bueno, y qué hay de Bruna? Todo bien?- pregunté nerviosa. Sí, es verdad que ya casi nada era incómodo entre nosotros dos pero cuando salía el tema de Bruna no podía evitar recordar lo que sucedió la noche anterior.
-Sí, no tardamos en hablar y en volver a la relación. Apenas nos vemos ya que ella viaja mucho pero todo va bien
- Me alegro - fingí una sonrisa. De verdad estaba feliz de que todo le fuera bien, pero había una parte egoísta en mi que no se alegraba tanto.
- Y tu qué tal? Ha aparecido alguien por tu vida? Algún ligue? - preguntó vacilando
- No, de momento no, aunque si es verdad que en la empresa donde trabajo me he cruzado un par de veces con un chico muy majo. Es súper gracioso, me alegra las mañana - dije sonriendo acordándome de un chiste que me contó hace unos días. Neymar no dijo nada, simplemente asintió.
- L'addition, s'il vous plaît- dije yo cuando ya terminamos de comer. Poco después nos la trajeron, pagué y nos dirigimos a la salida.
-Ha sido un placer cenar con vosotros - dijo Vera
- Gracias por invitarnos - habló Kylian
- Siempre que queráis - dije y sonreí
- La próxima vez pagamos nosotros - dijo esta vez Neymar
Nos despedimos con dos besos y Vera y yo nos fuimos al apartamento
- Te lo has pasado muy bien no? - dije sentándome en el sofá al lado de Vera después de llegar a casa
- La verdad es que sí. Me encanta charlar con Neymar y con Kylian.
- Sobre todo con Kylian - dije riendo. Ella se sonrojó- Últimamente estáis muy juntitos
- No lo hacemos aposta, supongo que surge solo - dijo disimulando. Se le daba fatal mentir.
- Ya ya. Venga va, se sincera, qué hay entre vosotros - Vera suspiró
- Se podría decir que nos estamos conociendo más a fondo
- Que te encanta vamos - dije resumiendo. Ella me lanzó una mirada amenazante. Yo levanté los brazos como si no hubiera hecho nada.
- Al menos yo no le he besado - Ufffff, golpe duro
- Iba borracha - conteste
- No niegues que tenías ganas de hacerlo
- Podemos hablar de otra cosa? - pregunté encendiendo la tv
- Claro - dijo Vera aguantándose la risa
Estuvimos viendo una serie de Netflix y después pedí unos días libres en mi trabajo ya que mañana había un partido del Psg contra el Real Madrid y era en España así que decidí que podría aprovechar y volver a mi país y le pedí a Vera que me acompañase. Ella estaba encantada, nunca había ido a España y tenía unas ganas enormes de visitarla, yo la enseñaría todo. Cuando me permitieron cogerme unos días abrí mi portátil y cogí dos vuelos a Madrid y hablé con Neymar para ver si me podía conseguir dos entradas ya que seguramente ya estaban todas vendidas. Me dijo que no había problema y que estaba encantado de que fuéramos a verles. Después de comprar todo, Vera y yo nos fuimos a un centro comercial que nos encantaba en París y pasamos allí todo lo que quedaba de tarde. Después volvimos a casa, cenamos y nos acostamos pronto ya que el vuelo mañana era a las 4am y nos tendríamos que levantar muy temprano para cogerlo a tiempo.
