Con la cabeza sobre el escritorio podía verse a un muchacho carente de fuerzas para mantener los ojos abiertos, estar toda la noche viendo los videos sobre Judo con el fin de intentar aprender algo lo dejó así, los resultados... Nulos.
Entendió un poco respecto a la posición y el agarre pero no entendía cómo era capaces de derribar a alguien más grande que ellos, parecía que obtienen fuerzas inexplicables para incluso elevarlos en el aire.
— Jigo... — su amiga susurró intentando hacerlo darse cuenta de algo que se estaba acercando.
— Sr.Kokujū — la profesora lo miraba fijamente llamando su atención, cuando levantó la cabeza para mirarla no podía dejar escapar un gota de sudor sobre su frente.
— no estaba durmiendo — el ceño fruncido hizo acto de presencia al escuchar lo que dijo, el chico no hizo más que esperar un posible regaño.
— el director te solicita en su oficina, luego hablaremos de lo que acabas de admitir — en ese momento es cuando se dió cuenta de cómo lo arruinó por él mismo, por hablar demasiado pronto.
Sin querer empeorar su situación solo se levantó del asiento y a vista de todos se retiró, no tenía la menor idea del por qué el director lo llamaría pero tenía que ir, el recorrido hasta su oficina fue tan solitario como estar en un pueblo fantasma, después de todo era horario de clases.
Habían pasado algunas semanas desde su pelea en el poso de los héroes, había estado entrenando lo que sabía hasta el momento aún sin saber cómo proseguir con el Judo, intentar aprender artes marciales simplemente viendo videos era algo bastante complicado.
Al abrir la puerta vió al director hablando con un hombre que estaba de espaldas mirando por la ventana, lentamente fue reconociendo a esa segunda persona al identificar aquel cabello tan destacable, naranja con un único y constante cambio a rojo hasta las puntas.
— ya llegó Sr.Kokujū, ¿Recuerda el tour en la empresa Phoenix? El Sr.Phoenix vino personalmente a hablar con usted — los ojos del menor estaban tan abiertos que sus pupilas se veían diminutas a comparación.
Realmente no se habían olvidado de él... a pesar de que no dijo nada en todo ese tiempo, tenían el renombre suficiente como para llamarlo desde el pretexto del instituto.
— quería hablar contigo en especial Kokujū — dió media vuelta para mostrar su figura que se oscurecía de sombras al tener la luz de la ventana justo a sus espaldas.
— ¿Que quiere? — no parecía una persona formada físicamente y esperaría que tampoco intente nada con el director mirándolos a ambos.
— te dió un malestar en medio del tour que evitó que estés al completo en él, quería hablar sobre ese tema — se fue acercando al chico a paso lento para darle unas palmadas en el hombro con absoluta confianza, con todo lo que había sucedido ese día que haga eso parecía una burla.
— si es sobre un tour grátis, gracias pero prefiero que no — se apartó del hombre acercándose más al escritorio del director que se mantenía expectante.
— por favor, lo último que quiero es que hables negativamente de mí empresa, y mostrarte de lo que verdaderamente es capaz — esas palabras parecían inofensivas pero detectaba un pequeño doble sentido en eso — mí empresa es muy grande y tengo mucho dinero, encargarme de un asunto como el tuyo es tan sencillo como chasquear los dedos — definitivamente estaba hablando en doble sentido, el director no parecía darse cuenta del verdadero peligro de sus palabras.
— yo lo veo como una buena oferta Sr.Kokujū — el director no estaba ayudando en lo más mínimo aunque era de esperar, le faltaba el contexto que sabía Jigosora.
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DEMON [Boku no hero academia] *PAUSADA*
FanfictionUn Quirklees más en el mundo. Hasta que algo despierta emociones que nunca lo definieron, ahora su ambición estaba más fuerte que nunca, para querer cumplir un sueño el cual siempre creyó imposible por ser un quirklees. ¡Convertirse en un héroe!