Tokyo Renvengers One Shots

✰ Takashi Mitsuya

Antes de comenzar, recuerden que tengo una historia de Izana llamada Conde Kurokawa, ¡Les agradecería mucho si le dan una oportunidad! ;)

También les agradezco por las 135k de leídas, estoy muy contenta porque este libro ha llegado muy lejos, los amo y gracias por su apoyo. ◡̈

Suspiro mirando con disimulo al chico sentado unos asientos detrás mio. Me obligo a solo mirarlo unos pocos segundos, y voltearme casi al instante. 

Apoyo mi cabeza sobre mi mano, algunos escenarios imaginarios llegan a mi mente, donde tengo el valor de hablarle, de intentar conocerlo mas, y sobretodo, que note mi existencia.

Si, hablo de Takashi Mitsuya.

Es uno de los chicos mas populares de la escuela, llegue hace unos meses y el es muy querido aquí, hemos compartido unas pocas palabras, pero realmente no es mucho.

Casi nada.

Y realmente es mi culpa, ya que soy demasiado tímida para dirigirle la palabra o siquiera estar muy cerca suyo.

Pero bueno, realmente estoy conforme con verlo de vez en cuando.

Eso no te lo crees ni tu.

Maldigo internamente al escuchar a mi conciencia.

Ja, ja, ja. 

¿Y si mejor me dejas tranquila? 

Nah, disfruto molestándote. 

Ladeo la cabeza y me concentro en seguir leyendo el libro que traje hoy a clase. Se trata de una recopilación de algunos de los mitos de la mitología griega, en este momento estoy leyendo —o bueno, intentando leer.— el mito de la historia entre Ariadna y Dioniso.

Digo intentando leer, ya que estar en el mismo sitio que Mitsuya —me guste o no.— me pone nerviosa.

Suspiro, tratando de enfocarme, y así lo logro durante los próximos diez minutos. Donde logro leer tranquilamente, hasta que escucho como alguien abre la puerta del salón bruscamente. Frunzo el ceño y ruedo los ojos.

Se trata de Peyan, uno de los amigos de Mitsuya, entra al salón llamando la atención de algunos de los que ya estamos dentro. 

El camina sin darle mucha importancia a las miradas, hasta que llega donde Mitsuya y se sienta a su lado. Ambos comienzan una conversación que no logro escuchar.

Antes de poder voltearme para sentarme bien en mi asiento, Mitsuya me mira. Nos miramos durante un segundo, antes de que yo me vuelva a recomponer en mi asiento.

Admito que estoy sorprendida, ya que no me esperaba que me mirase, a pesar de que fue casi algo muy efímero, en mi mente sera eterno.

Eww, que te haz puesto romántica. 

Ruedo los ojos internamente.

❍❍❍

Ya las clases terminaron y mi amiga Aoi me ha pedido que lleve unas cosas al club de economía domestica, realmente no se de que se trata, mi amiga fue muy clara cuando me pidió que solo lo abriera Mitsuya.

Ay, como me arrepiento de no revisar el contenido. (Att: Yo del futuro.)

En fin, ustedes estarán pensando en como le voy a entregar esto a Mitsuya, y bueno...

Arme un plan.

Por lo que he oído, Mitsuya cuando esta dentro del club es alguien muy ocupado, entonces, le daré esto a una de las chicas que hace parte y le pediré que se lo de por mi. 

Pan comido.

Camino hacia el club tatareando una canción alegremente, esta es una oportunidad mas para verlo, se que algún dia me animare a hablarle.

Hoy no, claramente.

Cuando llego, toco la puerta y esta se abre abruptamente, doy un pequeño saltito que casi hace que se me caigan las cosas, pero por suerte no pasa.

Cuando organizo todo veo a una chica con trenzas, de cabello negro y ojos oscuros. La he visto algunas veces mientras llego a la escuela, pero hasta ahí. 

Pero bueno, eso es lo que menos importa.

Ella se ve muy apenada y me mira con avergonzadamente. —¡Disculpame! Pense que eras otra persona... —ella agacha un poco la cabeza pero vuelve a alzarla casi al instante. —No fue mi intención.

Niego con la cabeza, sonriendo. —No te preocupes, fue un accidente. 

Ella asiente, agradecida. 

—Y dime, ¿que necesitas? —me dice con cierta seriedad en su voz, pero sus ojos expresan alegría.

Bajo la mirada hacia la entrega que tengo para Mitsuya. 

—Una amiga me pidió que le diera esto a Mitsuya, ¿podrías dárselo por mi? —le pido dándole las cosas.

Ella las toma, sorprendida. 

—El esta aquí, ¿no se lo quieres dar tu misma? —me pregunta, ladeando la cabeza en dirección a el.

Niego la cabeza. —Tengo que irme, me están esperando afuera y no quisiera tardarme mas. 

Antes de que me responda, hago un ademan con la mano despidiéndome mientras procedo a  salir de la escuela.

Suspiro alegremente, fue mas fácil de lo que pensé. 

❍❍❍

Por otra parte esta Mitsuya, quien dejo de coser para revisar lo que le habían traído, se le hacia muy extraño esto, ya que no suelen darle este tipo de cosas.

Se trataba de una pequeña cajita, totalmente negra y sin decoración. El la abre con cuidado y se sorprende de ver una carta, doblada en varios pedacitos.

Cuando desdobla la hoja, empieza a leer. Sorprendiéndose por el contenido, nunca le había pasado algo parecido y se le hacia muy interesante. 

Lee la carta con mucha atención, y cuando termina solo puede sonreír, guardándola para volver a leerla después.

*La carta tiene que ver con la prota.