Mi Multiverso [En Proceso]

5. Gran tormenta

Lamentablemente yo no contaba con la magnifica "habilidad" del autocontrol, así que un pequeño momento de pánico me invadió mientras los veía a ellos hablando sobre lo que Derek y yo íbamos a cenar. No tuve a donde correr, solo me encerré en el baño. Estaba segura de que hubiese salido corriendo del restaurante sino fuera por la tormenta que yacía afuera.

Derek no me detuvo, solo se quedo sentado en la mesa con una expresión de "¿Que rayos Ashley?", aún con él menú en la mano; y Mackenzie siguió con su protocolo de mesera. La expresión de la rubia era simple y desinteresada.

Llegue al baño y pase el seguro rápidamente. Me sentía ahogada de dudas, algunas de ellas eran:

¿Derek planeó todo esto?

¿Mackenzie y él aún tienen algo?

¿Él esta jugando conmigo.. de nuevo?

No sabia porque pero tenia un presentimiento extraño, un poco de inseguridad y ansiedad tal vez, no lo sé. Solo sabia que tenía unas inmensas ganas de desaparecer.

Aunque una parte de mi seguía confiando en el chico, no podía negar que era más que casualidad haber venido hasta aquí, justo donde Mackenzie trabajaba. Existiendo una cantidad considerable de restaurantes en California.

Tenia la necesidad de encararlo, de mirarlo directamente a esos grandes ojos verdes y preguntarle si el sabía a donde nos había traído y si.. me ocultaba algo. Porque en lo que Derek Wood había sido muy bueno desde que lo conocí era en ocultar sus secretos.

Y yo sabia que nunca lo iba a terminar de conocer por mas que intentase, él no podía dejar que otros supieran sus debilidades porque eso arruinaría por completo la reputación que él se había creado.

-Ashley, ¿estas bien? -habló Derek desde el otro lado de la puerta.

Ante mi silencio, él continuó hablando.

-Llevas mas de diez minutos allí encerrada.

Solté un gran suspiro y quite el seguro de la puerta con cuidado para luego abrirla.

Y al verlo allí parado frente a mi, me decidí.

Me acerque lentamente hacia él tratando de verme segura. Vi directo a sus ojos. Y le pregunté.

-¿Sabias que Mackenzie trabajaba aquí?

Note como sus ojos se abrieron un poco en sorpresa.

-No. No tenía idea Ashley. -respondió con seriedad.

-¿Estas seguro Derek?

Le di una mirada desafiante y sentí lo tenso que estaba el ambiente entre nosotros.

-¿Crees que te habría traído aquí si hubiese sabido eso?

No le respondí nada, pero mantuve mi mirada seria sobre él, hasta que soltó un inesperado..

-Te amo.

Eso me sorprendió mucho, Derek nunca me había dicho aquello. Era la primera vez... Y se le escucho tan sincero.

El rubio se acerco a mi y me envolvió con sus brazos tiernamente.

-Confia en mi, preciosa. -susurró cerca de mi oído.

Me sentía como si me estuviera derritiendo, y eso era tan irónico. Hace un momento estaba enojada con él y ahora parecía un blando algodón de azúcar.

Mi inseguridad desapareció en poco tiempo, pero sabia que volvería en cualquier instante, por eso debía hablar con él. Acordé hacerlo otro día para disfrutar de este abrazo, de esta nueva versión de Derek que no había visto jamás, y que amaba.